Así lo confirmó el ministro de Economía de Santa Fe, Ángel Sciara. El mecanismo de endeudamiento será con títulos públicos que el Estado colocará en el mercado durante 2010. El ministro de Economía de Santa Fe, Ángel Sciara, confirmó que este año el gobierno de la provincia emitirá bonos para financiar la obra pública.

Foto Diario UNO

Serán títulos públicos que el Estado colocará en el mercado, aunque todavía no está definido a qué tasa de interés. Tal como ya estaba dispuesto en el Presupuesto 2010, la autorización de endeudamiento es de 1.600 millones de pesos pero luego de aprobarse el Fondo de Emergencia Salarial podrían derivar hasta 250 millones para pagar haberes a los empleados públicos y docentes.

—¿El endeudamiento para pagar salarios ya está en trámite?
—Nosotros estamos trabajando en un endeudamiento mucho más comprensivo y estamos armando la arquitectura de la emisión de títulos públicos, podría entrar allí o no, dependerá de las condiciones del mercado financiero para saber cómo, cuándo y con quién salimos a colocar títulos públicos para obras de infraestructura como lo hemos sostenido desde siempre. Esta autorización de endeudarse para pagar salarios yo voy a retacear, salvo en caso extremo de que pudiéramos necesitarlo, pero siempre en el corto plazo.
“Nosotros consideramos –continuó– que esto es simplemente hacer pagar a la sociedad intereses sobre deuda para pagar salarios y yo creo que ni las generaciones presentes ni las generaciones futuras tienen que caer en este costo. Por eso insistimos mucho en que el endeudamiento tiene que estar orientado hacia la inversión pública, porque bien asignada genera servicios y bienes públicos que van a ser aprovechados por otras generaciones”.
—¿Y cuánta plata podría invertirse en títulos?
—Nosotros tenemos la autorización de los 1.600 millones de pesos, no creo que lleguemos a eso. Estamos pensando en cifras menores y vamos a seguir todos los pasos legales necesarios para ello, incluso la necesaria autorización de la Legislatura para acordar los montos del costo financiero, los plazos, etcétera.
La idea central del economista que tiene Hermes Binner es que un monto importante de lo que figuraba como obra pública en el presupuesto 2010, cerca de 900 millones de pesos, sean financiados con recursos externos para poder llevarlas a la práctica. “Ahí también estamos utilizando adecuadamente el Fondo Solidario Sojero, para poder realizar las obras públicas siempre dentro del decreto presidencial que orienta el destino de estos fondos: salud, educación, obras viales y para determinado tipo de infraestructura social.
Además, el funcionario remarcó que como consecuencia de la “enorme rigidez del gasto” público en la provincia, cada vez que se hace imperioso conseguir recursos se retacea a la obra pública, porque es allí de donde se pueden sacar urgente los fondos para hacer frente a otras obligaciones. “La obra pública es en general siempre la variable clave que se usa”, dijo Sciara.
En ese sentido, indicó: “La usó el gobierno justicialista (de Carlos Reutemann) en la crisis de 2001, la usaron los que eran ministros de Economía y de Obras Públicas de ese entonces (Juan Carlos Mercier). En declaraciones periodísticas señalaban que las maneras que tenían de resolver el problema era disminuir la obra pública y que se iba a recomponer en cuanto aparecieran créditos”. Con esa premisa, es que la administración del Frente Progresista, Cívico y Social optó por la emisión de títulos públicos, cotizables en el mercado, para pagar la realización de gran parte de la obra pública que se proyectó para este año.
Fondo salarial
En su evaluación técnica del problema de liquidez de las arcas del Estado, el ministro Ángel Sciara indicó que no obedece a una cuestión financiera sino a una eminentemente económica. Por ese motivo recordó que las reformas impositivas de 2008 y 2009, además de algunas otras propuestas legislativas que también fracasaron, “intentaban resolver un problema económico que la provincia está teniendo desde el 2007 en adelante, cuando se acabó la época de las vacas gordas” y la recaudación propia se retrajo.
Frente a ese panorama, es que el ministro consideró que “el llamado Fondo de Emergencia Salarial” que impuso el PJ a través de su mayoría legislativa en el Senado santafesino “es una falacia, es decir, es un conjunto de elementos verdaderos pero que en su totalidad construyen un argumento falso”. Al respecto, explicó que la iniciativa de la oposición “suma lo cierto con lo incierto, lo real con lo eventual, las deudas con los recursos genuinos, suma partidas presupuestarias que van contra déficit y las considera como que van contra recursos”.
Por ejemplo, dijo que el justicialismo sumó en el fondo “los famosos montos contingentes para aumentos salariales de 500 millones de pesos, o sea, en un presupuesto que tiene 1.600 millones de déficit, evidentemente esos 500 millones de gastos van contra déficit, nunca van contra recurso”. También se quejó porque entre los dineros que se dispusieron aparecen 450 millones de pesos en virtud de la “posible” coparticipación total del Impuesto al Cheque, que incluso la Presidenta de la Nación ya dijo que es un gravamen que podría eliminarlo.
—Pero pareciera que muchos de los argumentos que esgrime (el senador Juan Carlos) Mercier son sólidos.
—Alguien que me demuestre la solidez de los argumentos. A mí me gustaría hacer un análisis de la clase magistral que aparentemente dio en el Senado (…). Me gustaría sí analizarlos detenidamente.
“Lo que creo que no son sólidos y es una falacia son los contenidos del fondo salarial y los argumentos que vertieron en los periódicos otros señores diputados (del PJ, como Mario Lacava o Silvina Frana). Creo que no son sólidos, creo que es aritmética pura, creo que están sumando cosas insumables. No es serio sumar partidas presupuestarias contra déficit como si fueran recursos, no es serio sumar autorizaciones de créditos junto con eventual ingreso de la derogación del impuesto al cheque, no es serio sumar la autorización del Fuco con el endeudamiento”, finalizó.

Fuente Diario UNO