«Los precios subieron una barbaridad. Si bien hay menos leche para nada esto convalida la remarcación de precios, que se incrementaron de manera atroz«, explicó el presidente de la Mesa Nacional de Productores Lecheros, Jesús Vanzetti

El presidente de la Mesa Nacional de Productores Lecheros, Jesús Vanzetti, aseguró hoy que “no va a faltar leche” para abastecer al mercado doméstico pese a la merma que experimentarán los tambos de Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba por las inundaciones e instó a “no convalidar” alzas en los precios de los lácteos en las góndolas.

“Los precios subieron una barbaridad. Si bien hay menos leche para nada esto convalida la remarcación de precios, que se incrementaron de manera atroz”, explicó Vanzetti tras ser consultado sobre la tónica alcista que experimentan los lácteos en las góndolas.

Por ello, el dirigente de la Mesa Lechera aseguró que “no va a faltar leche” pese a las dificultades que experimenta los tambos de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos por el anegamiento de campos tras las fuertes lluvias registradas en abril.

Vanzetti refirió que “los precios en las góndolas subieron una barbaridad porque aducen que falta leche pero si bien la pérdida de producción es importante el mercado está abastecido y los precios deberían ser normales”.

Al respecto, el dirigente tambero afirmó que “seguro” la remarcación de los lácteos en los comercios y supermercados se produce por la decisión de este sector de “sacar una diferencia” a costa de la crisis que enfrenta la lechería.

Más allá de esto, desde la Mesa Nacional Lechera reconocieron que la pérdida en la producción en Santa Fe es del 50 por ciento, porcentaje que ronda el 40 en el caso de Entre Ríos y Córdoba, y el 10 por ciento en Buenos Aires.

Desde el sector tambero reconocen que por la leche entregada en abril se espera que la industria abone un valor promedio de entre 3,20 a 3,5 pesos, cifra que treparía posiblemente cercana a los 4 pesos para las entregas de Mayo.

En las zonas afectadas por el anegamiento de los campos, los productores admiten el importante impacto que tendrá en la producción la pérdida de pasturas, la muerte de animales y la decisión de pasar lotes enteros de vacas a faena por la imposibilidad de alimentarlas.

A esto se le suma el impacto que podrá tener además el impacto de subas en las tarifas de la electricidad y también el encarecimiento del combustible, especialmente el gasoil.

La realidad en buena parte de centro norte de Santa Fe, y también en el oeste cordobés y este entrerriano, es la presencia de campos devastados por la inundación o bien el crecimiento de las napas, hecho que dificulta enormemente las posibilidad de recuperar la actividad y la producción.

Fuente SRLC