Una tarde de diciembre de 1884, el barrio porteño de La Boca se vio turbado por un voraz incendio. De entre el publico salió, un muchacho gritando: «adelante los que se animen, vamos a apagar el incendio!» Así, Orestes Liberti se convirtió en el líder de aquel improvisado cuerpo de Bomberos.
Dos años mas tarde, un 2 de Junio quedó conformado el primer cuartel de Bomberos Voluntarios del país, a instancias de la autoconvocatoria de vecinos que buscaron protegerse de los siniestros que los asolaban.
Desde ese entonces y con mucho sacrificio, muchos cuarteles han sido fundados a lo largo del país por personas con profundo sentido cívico, e integrados por valientes que arriesgan su vida diariamente en pos del bien común sin pedir recompensa.
Cada 2 de Junio, además de recordar aquel primer paso, los bomberos celebramos la finalización de la etapa de adiestramiento de los aspirantes, los ascensos del personal, la compra de materiales contra incendio o rescate etc.
Este día cada integrante renueva su compromiso de perfeccionarse en la dura tarea de ser Bombero Voluntario, en compañía de amigos, familiares, prensa y la comunidad en general.