Muchos jugadores consideran como un salto de calidad ser transferidos a los clubes más importantes del mundo, pero Alemania 2006 parece ser el trampolín deseado para los que participan del certamen y tienen buenos rendimientos.
El volante argentino Maxi Rodríguez sólo estaba en los planes del técnico José Pekerman, ya que no era muy tenido en cuenta por los hinchas. Ahora, junto al español estrella Niño Torres (eliminado este martes en manos de Francia), es pretendido por el Milan, que pagaría 40 millones de euros por ambos.
El partido del viernes entre Argentina y Alemania será una gran oportunidad para que muchos futbolistas muestren sus condiciones y lo que valen. Mirando al local, el destacado es el goleador Lukas Podolsky, que se enfrentará ante otra figurita importante: Carlos Tevez. El apache es pretendido por los clubes más poderosos de Europa y deslumbra cuando le toca entrar al campo de juego.
También, tarde pero seguro, aparecieron los que supieron descollar en mundiales pasados. Ronaldo se encendió y ya es el máximo goleador de los mundiales. Mientras que Zinedine Zidane tuvo una gran actuación para darle a Francia un lugar en los cuartos de final.
Pero así como hay figuras que están mostrando un gran juego y suben su cotización, también están las grandes decepciones.
Paradójicamente, el compañero de ataque del Niño Torres en Atlético Madrid, Mateja Kezman, es la contracara del español. El serbiomontenegrino se despidió de la Copa del Mundo en primera ronda, su actuación fue sin pena ni gloria y dejó la concentración de su seleccionado faltando un partido para que se despida de la competición.
Drogba convirtió un gol ante Argentina y su actuación fue discreta. Al quedar afuera Costa de Marfíl no pudo demostrar todo lo que se habló de sus condiciones.
Las recuperación de las lesiones también influye en los bajos rendimientos. Wayne Rooney, delantero estrella de Inglaterra, sufrió una fractura en el pie derecho hace dos meses y estuvo en duda para Alemania 2006. Los ingleses están en cuartos de final y siguen esperando por sus goles.
Por último, si bien Riquelme, Ronaldinho y Schevchenco no necesitan subir más el valor de sus pases y nadie duda de sus cualidades, parecen estar en una siesta mientras sus equipos avanzan.
En los cuartos de final habrá que ver si las revelaciones se mantienen y si las decepciones se despiertan en el desenlace del torneo.
Fuente: Télam