La masa de empleados en nuestro país asciende a 15 millones.
Con la decisión adoptada por el plenario del Consejo del Salario ahora ningún empleado debe percibir un haber por debajo de la canasta básica, es decir, menos de 857 pesos.
El acuerdo por el salario mínimo finalmente llegó luego de una semana de intensas negociaciones orientadas por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada.
Los sindicalistas de la CGT como los representantes de las empresas consensuaron una postura común luego de una gestión de Tomada para escalonar el aumento.
Hasta ahora el sueldo mínimo era de 630 pesos y pasará inmediatamente a 760, 780 y 800 en noviembre.
Con esta última cifra, el salario de un trabajador se conformará de la siguiente manera: 800 pesos más 120 por asignaciones familiares (dos hijos) y 58 correspondiente al proporcional del aguinaldo.
Estos valores sumados resultan en 978 pesos, aunque deben restarse 109 de los aportes jubilatorios, lo que resultará en un salario de bolsillo de 869 pesos.
Esta es la cifra que vino a buscar la CGT de Hugo Moyano, José Luis Lingeri y Juan Manuel Palacios para que un asalariado no perciba haberes por debajo de la canasta básica.
Los trabajadores registrados que el próximo mes verán incrementado su salario son 772.000 y los no registrados 2 millones. Cabe mencionar que la resolución comprende a trabajadores «en blanco» y «en negro».