Tras una extensa sesión, que demandó más de once horas de debate, la Cámara baja dio la sanción definitiva al proyecto de reforma de ley
de Administración Financiera que permite al jefe de Gabinete redistribuir partidas del Presupuesto Nacional, sin pedir autorización al Congreso.
Los diputados convirtieron en ley la norma impulsada por el oficialismo y cuestionada por el arco opositor, que no bajó al recinto hasta que el kirchnerismo logró el quórum necesario para iniciar el debate.
Sin embargo, el oficialismo tuvo garantizada la aprobación definitiva del proyecto -que cuenta con media sanción del Senado- con el respaldo de sus propios legisladores, 15 del Peronismo Federal, los diputados del Partido Nuevo que lidera el intendente de la ciudad de Córdoba, Luis Juez, y otra media docena de aliados.
El proyecto propone una reforma del artículo 37 de la ley de Administración Financiera para que el Jefe de Gabinete pueda redistribuir las partidas entre el gasto corriente y de capital con excepción de los recursos de seguridad e inteligencia, sin pedir autorización al Congreso Nacional.
La sesión se inició dos horas después de los previsto con la presencia de 135 diputados presentes pertenecientes al oficialismo que debió lograr quórum con sus propios legisladores.
En el marco de una extensa sesión, que demandó más de 11 horas de debate, los diputados sancionaron la norma por 134 votos contra 91, con el respaldo del oficialismo y el rechazo de un amplio arco opositor.
La defensa del proyecto oficial estuvo a cargo del titular de la comisión de Presupuesto de la cámara baja, Carlos Snopek, quien advirtió que la oposición «está intentando colocar en cabeza de la opinión pública algo que no es verdad», al señalar que, a través de esta iniciativa, «no se está tocando la Constitución».
En esa línea, la diputada kirhnerista por Mendoza, Patricia Fadel, afirmó que «quiénes nos difaman son los mismos que sumergieron a nuestro país en las dos crisis más nefastas que tuvo la Argentina desde el inicio de la democracia. Infamia y traición a la patria es llevar al país a la hiperinflación».
También, desde el Peronismo Federal, el diputado Alfredo Atanasof, ex Jefe de Gabinete de Eduardo Duhalde, defendió la reforma a la ley de Administración Financiera y justificó la
norma, al destacar que dotará al gobierno nacional de «mayor capacidad de reacción» para enfrentar problemas.
Desde el radicalismo, el diputado nacional por Mendoza, Roberto Iglesias, manifestó el rechazo de la UCR al proyecto, al sostener que la reforma a la ley de Administración Financiera es «una delegación de funciones» que el Congreso, dijo, «no puede dar», al considerar que se trata de una norma «inconstitucional».
En tanto, el PRO a través del diputado Esteban Bullrich expresó «no es una buena ley» porque, dijo «está atacando la representación de las minorías», al advertir que «cuando la
mayoría de la dirigencia política argentina sea realmente republicana este proyecto sera derogado».