Creen que la crisis también debe ser asumida por los usuarios residenciales. La Unión Industrial de Santa Fe (UISF) se mostró preocupada por la situación que vive el sector a partir de las restricciones energéticas y pidió que el gobierno tome las medidas que eviten un agravamiento en las condiciones de producción sin que afecten el modelo productivo.  «La única solución que no se puede aceptar es la de superar las actuales restricciones con un sacrificio del modelo productivo«, señalaron en un comunicado que esta mañana la Fisfe llevó a la Unión Industrial Argentina (UIA).

Los empresarios se reunieron el lunes por la tarde en la sede de la entidad donde, después de una larga discusión, acordaron pedir al gobierno, en primer término, que «reconozca que el problema existe» y al mismo tiempo encarar «un plan de coyuntura que permita superar las restricciones actuales«.
«El gobierno tiene que transmitirle a la sociedad que existe un problema y, como todo el mundo consume energía, que los sacrificios no recaigan sólo en nosotros, los industriales. Que el costo se distribuya lo más eficiente y equitativamente posible«, pidió Carlos Bertone, el representante de la Unión Industrial de Santa Fe en la Federación de Industrias de la provincia.
La mayoría de las empresas afiliadas a la entidad están sufriendo las restricciones de energía pero, de acuerdo con los dichos del vicepresidente de la UISF, Javier Martín, el problema aún es manejable. «Estamos haciendo todo lo posible para que la situación no se agrave«, afirmó.
«Todas las empresas de la región están viviendo las dificultades en las restricciones energéticas. Y nos preocupa la evolución de la crisis: pasamos de tener cortes entre las 18 y las 22 horas, a tenerlos de 16 a 23 y ahora dicen que está en estudio hacerlo las 24 horas, con lo cual se tornaría muy difícil mantener los ritmos actuales de producción y generarían reacomodamientos. Queremos evitar a toda costa la suspensión de personal«, explicó Javier Martín.
El problema, destacó Martín, es que las restricciones «comienzan por los grandes usuarios, que a su vez afectan la cadena de valor hacia abajo y terminan perjudicando después a los medianos, a los chicos y a todo el mundo. Hoy el crecimiento está amenazado seriamente. De continuar esta situación se afectara. Ya hay muchas empresas que están perdiendo producción«, resaltó.

Para todos

Más adelante, en el documento piden que «las restricciones a los suministros energéticos no recaigan solamente en el sector industrial» y solicita «buscar soluciones que distribuyan las cargas causando el menor costo productivo y social«.
«No queremos que se produzcan efectos no deseados en el aparato productivo como suspensiones laborales, rupturas de cadenas de valor y postergación de inversiones que en definitiva harán caer la actividad económica«, dicen.
«La solución no pasa sólo por recortar el consumo industrial. El consumo domiciliario creció 26 % el último año, por lo cual tiene que formar parte de la solución del problema. Se tiene que involucrar a todo el mundo. Hay que crear conciencia y se debe racionalizar el consumo de energía porque hoy es un bien escaso y lo será hasta finales de 2008. Entonces sólo con el sector industrial no vamos a solucionar el problema«, enfatizó Javier Martin.
Otro de los temas que preocupa a los industriales santafesinos es la falta de planificación en las restricciones, por eso, piden, «una planificación clara, para que la producción pueda realizar los máximos esfuerzos en la programación de su producción«.
Los industriales se quejan porque las restricciones se anuncian de un día para el otro, «con lo que se hace muy difícil tomar las medidas necesarias para adecuar los sistema de producción«.
Finalmente, reclaman del Estado una solución estructural del problema que «implica una definición geopolítica del gobierno sobre la matriz energética de los próximos 10 años«.

Fuente ElLitoral.com