La protesta de los productores sigue hasta hoy a las 24; las entidades evalúan si mantienen la medida hasta el miércoles que viene; Fernández dijo que le produce «asombro e indignación«.

Con la fuerte suba de las retenciones como principal detonante y con la posibilidad de extender las medidas de fuerza hasta el miércoles que viene, los productores agropecuarios comienzan hoy su segundo día de paro.

Las medidas de fuerza se profundizarán hoy ya que están previstos cortes de ruta y movilizaciones en varias ciudades del interior mientras que Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) debatirá hoy si las medidas se extienden hasta la semana próxima, lo que podría provocar el faltante de algunos productos.
Ayer las bolsas de cereales de Rosario, Buenos Aires y Bahía Blanca estuvieron inactivas. Por otro lado, en el Mercado de Liniers, como todos los jueves, la operatoria fue acotada.

Cordura

El Gobierno llamó a los productores a recuperar la cordura. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, afirmó hoy que el paro le produce «asombro e indignación», los llamó a la «cordura», y les recordó cuando «venían lloriqueando para que no les rematen los campos y fue este Gobierno el que le refinanció» sus deudas.
Fernández volvió a expresar su rechazo a la medida de fuerza y advirtió que «algunos de estos señores» productores «pretenden» que los bienes primarios como el trigo o la carne sean tan caros como en los países donde no se producen.
El ministro, en diálogo con radio América, dijo que con los hombres del campo «tendríamos que estar sentados para programar esta oportunidad que tenemos» de exportar y lograr importantes ganancias.
«Espero que terminemos con tanta altisonancia, que no le mintamos a la gente, al campo le está yendo muy bien», afirmó Fernández en diálogo con Radio 10.
No obstante, Fernández negó que una eventual prolongación del paro que llevan a cabo las entidades rurales afecte el diálogo con el Gobierno.
«Lo que yo lamento es la reacción insólita» de parar, señaló el jefe de Gabinete, y recordó que hay que tener en cuenta que «la soja creció en el último año casi un 90 por ciento y el girasol creció más del 100 por ciento en precios internacionales».
A su criterio, lo que el Gobierno hace es «fijar un horizonte de proyección a las retenciones para que cada uno sepa lo que va a pasar en los próximos cuatro años, cualquiera sean los valores».
Describió que los hombres de campo «han multiplicado por cuatro el valor de sus campos, han obtenido inmensas ganancias con los precios internacionales que gracias a Dios han existido».
«Cuando uno los escucha hablar, francamente se asombra. Estos señores están hablando como si estuvieran en una situación de pérdida absoluta y hace cuatro años nunca el campo estuvo como ahora. El campo no ha tenido bonanza económica en los últimos 30 años mayor que ésta», afirmó.