Crece la preocupación por las dificultades para conseguir nafta y gasoil, la amenaza de desabastecimiento de alimentos se agudiza por la persistencia de los cortes. Según el Gobierno hay más de 300 manifestaciones.
Cuando faltan horas para un nuevo fin de semana largo, se profundizan las complicaciones derivadas de los cortes de ruta que realizan los transportistas de granos, en reclamo a una solución del conflicto entre el Gobierno y el campo para volver a trabajar normalmente.
A primera hora de la mañana tenemos contabilizadas 324 manifestaciones» en todo el país, puntualizó Aníbal Fernández en alusión a los bloqueos de rutas. Sin embargo, en declaraciones, Aníbal Fernández ratificó: «Nosotros no vamos a reprimir, aspiramos que no haya acciones de esas características que signifiquen pérdidas de vidas».
A la amenaza de desabastecimiento inminente de alimentos y medicamentos, se suma la falta de combustible, que se profundiza en el interior. Existen también dificultades para el transporte de pasajeros, que pretenden viajar durante el fin de semana largo.
En Capital
La falta de combustibles en el interior del país «es muy crítica» y podría empezar a sentirse en los próximos días en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense. Así lo señaló la presidenta de la Federación de Empresarios de Combustibles de la República Argentina (Fecra), Rosario Sica.
La dirigente señaló que a radio 10 que en el interior del país «los conductores deambulan por las estaciones de servicios buscando a ver cuál tiene combustible». A su criterio el sector está atravesando una «situación muy crítica, sin miras de solución».
Precisó que «las provincias de Entre Ríos, Corrientes, norte de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Jujuy, Salta, Santiago del Estero y Formosa están pasando momentos muy difíciles» y afirmó que «la Capital es la que está en mejor posición porque no está con las plantas bloqueadas».
Interior
- En Santa Fe el panorama se tornó muy complejo en Rosario y varias localidades del interior. Por la reducción de la oferta de combustibles se cancelaron servicios de media y larga distancia y otros fueron reprogramados. La crisis en el transporte ya afectó las reservas turísticas que cayeron un 60 por ciento. Además, se redujo el servicio de taxis y remises en las principales ciudades.
- En Entre Ríos, la situación más preocupante se vive en la capital. En Paraná, ya no hay nafta y crece la escasez de gasoil. El transporte público funciona con restricciones gracias a un préstamo de 48.000 litros de gasoil que el municipio local entregó a las empresas.
- En Córdoba, una fiscal ordenó liberar el bloqueo de transportistas ubicado desde ayer frente a la planta que Repsol-YPF en la localidad de Monte Cristo, que impedía el normal abastecimiento de las estaciones de servicio de la ciudad. Por orden de la Justicia, la Guardia de Infantería están instalados en el lugar para garantizar el normal ingreso y salida de camiones desde la planta.
De las 500 estaciones que hay en la capital provincial, sólo un puñado tiene nafta y gasoil con precios que rondaban los 4 pesos el litro.
- La Rioja: La capital provincial y las principales ciudades del interior provincial padecen el desabastecimiento de combustibles debido a la prolongación del paro de transporte de cargas y los cortes de rutas.
En las estaciones de servicio de la capital provincial, salvo algunas excepciones, ya no queda ningún tipo de combustible y donde aún se expende las colas tienen varias cuadras de largo, consignó la agencia estatal Télam.
- La Pampa: La venta de combustibles es normal en Santa Rosa, aunque, desde hace varios días cada vez es más masiva la afluencia de clientes cargando combustible ante el temor de una eventual escasez en los próximos días.
Alimentos
Por otra parte, representantes de varios sectores ligados a la comercialización de alimentos, volvieron a advertir que, si los bloqueos se extienden, se agudizará la escasez de productos en las góndolas.
Las provincias más afectadas por los cortes son Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba, Santa Fe y La Pampa.
En medio del complejo escenario, el Gobierno volvió a mostrarse intransigente respecto a las retenciones, disparador de la protesta del agro. No obstante, el ministro de Justicia, Aníbal Fernández, aseguró hoy que es necesario sentarse «a discutir políticas» con el sector agropecuario.