El intendente Sergio Leavy aseguró que están llegando muchísimas cosas a la ciudad salteña afectada por el alud, pero siguen necesitando ayuda.
Además, dijo que «las escuelas no están afectadas» y que quieren retomar las clases. La lluvia que afecta hoy a Tartagal dificulta las tareas de recuperación que se realizan en las zonas afectadas por el alud que se produjo el lunes pasado, indicaron hoy funcionarios de ese municipio salteño.
El intendente de Tartagal, Sergio Leavy, indicó que «está lloviendo» y sostuvo que «eso es una mala noticia porque la gente sigue resistiendo en su casas y está en una forma precaria».
Leavy señaló en radio Diez que «faltan muchas cosas» y precisó que «se necesitan chapas, plásticos, elementos de trabajo como guantes, botas, capas para la lluvia, botines, cascos y pantalones», para las tareas de recuperación de la ciudad.
El funcionario agregó que en materia de alimentos se precisa «tener con anticipación la carne porque se compra día a día y se demora la entrega».
Añadió que «hay que alquilar hidrolavadoras, faltan 40 baños químicos porque la arena se metió en la cloacas y elementos de limpieza porque cuando se saca el barro de las casas hay que desinfectarlas».
Por su parte, el secretario de Gobierno de Tartagal, Roberto Avellaneda, insistió en que «la lluvia ocasiona inconvenientes y es un nuevo problema que impide trabajar».
En cuanto a los casos de dengue en la zona, Avellaneda dijo en radio Del Plata que antes de que se produzca el alud «existía el problema porque hubo un rebrote de la enfermedad en Bolivia».
En ese sentido, agregó que «se estaba trabajando en la limpieza de pastos verdes» como en tareas de prevención de la enfermedad.