La creciente demanda de pasajes hacia Buenos Aires (ida y vuelta) derivará el próximo mes en una mayor frecuencia, en contraste con Rosario, donde sólo operará la empresa Sol.
A partir del 1 de octubre, la empresa Aerolíneas Argentinas agregará un nuevo vuelo semanal entre Santa Fe y Buenos Aires, debido a la creciente demanda de pasajes. Cada día un promedio de 80 pasajeros parte desde el aeropuerto de Sauce Viejo con ese destino. Incluso los viernes por la noche, el avión sale completo (108 personas).
El mes próximo todos los vuelos serán directos a Buenos Aires, ya que Rosario dejará de ser escala, por las bajas ventas de pasajes. En la ciudad del sur provincial continuará operando Sol Líneas Aéreas.
En las últimas semanas, las ofertas tuvieron el efecto esperado en las ventas. Entre otras promociones, Aerolíneas Argentinas ofrece un paquete en clase turista, ida y vuelta, a 306 pesos; que incluso permite una diferencia de 48 horas entre un vuelo y otro (por lo cual muchos lo utilizan para viajar el viernes por la noche y regresar el lunes). De todas maneras, los pasajes más costosos en esa clase valen 486 pesos (ida y vuelta).
En octubre, la empresa agregará un vuelo los días jueves a las 20.50. En tanto, mantendrá la frecuencia actual: lunes a las 8.18; martes, miércoles y jueves a las 11.38 (más el nuevo horario); y viernes a las 20.50. Hasta fin de septiembre, Aerolíneas mantendrá la escala en Rosario los días martes, miércoles y jueves.
Situación inversa
Si un pasajero quiere reservar un vuelo de Aerolíneas Argentinas desde Rosario a Buenos Aires para los primeros días de octubre se encuentra con una respuesta insólita: “Mejor llame a Sol”. Y Sol es nada menos que la competencia, por lo que el consejo suena raro.
Mientras en los mostradores locales de la línea de bandera argumentan que lo que pasa es que “todavía no llegó la programación” de vuelos para el mes próximo, el presidente del directorio de la terminal de Fisherton, Raúl Garó, reconoció ayer, al término de una reunión con los responsables de Aerolíneas Argentinas, que la empresa dejará de volar a la ciudad desde octubre pero que no suspenderá esa ruta hasta fin de año como se dijo sino que habrá una “reprogramación” de su esquema de vuelos.
Garó explicó que Aerolíneas “reprograma en estos días” su oferta y señaló que “en esa reprogramación existe la posibilidad de que se vuelvan a vender pasajes desde y para Rosario”.
Por lo pronto, los vuelos a la ciudad dejarán de realizarse aunque según reconoció el titular del aeropuerto local no serán muchas las personas afectadas.
El renovado Aeropuerto Internacional Islas Malvinas no termina de levantar cabeza. Pese a que hace una semana sus autoridades anunciaron que empresas y organismos públicos de la región impulsarían un lobby para captar pasajeros y recuperar vuelos internacionales desde Rosario (a Ezeiza, el sur y norte del país, Estados Unidos y Canadá) ayer circuló una nueva pálida.
Por empezar, los empleados de Aerolíneas en Rosario admiten no tener programación de vuelos para octubre y tampoco es posible hacer reservas ni comprar un pasaje.
Pocos vuelos
En el ambiente turístico y aeronáutico nadie arriesga hipótesis sobre qué pasará con los ya escasos vuelos que Aerolíneas opera desde la ciudad: sólo uno y apenas tres días a la semana, martes, miércoles y jueves, como escala desde Aeroparque a Santa Fe.
En realidad, los aviones de la línea aérea que, tras la reestatización, es nuevamente de bandera, despegan y aterrizan con muy pocos pasajeros, entre diez y veinte por día, lo que representa aproximadamente un 15 por ciento de la demanda local.
Por Sol Líneas Aéreas, en cambio, que tiene cuatro vuelos diarios sólo a Buenos Aires de lunes a viernes y uno los sábados y domingos (más otros tanto de vuelta), viajan más de 200 pasajeros por día. Esa firma transporta el 85 por ciento de la demanda local.
Y es vox pópuli que lo que requiere el mercado aeronáutico entre Rosario y Buenos Aires es “más oferta de horarios”, ya que la mayoría de quienes vuelan entre las dos ciudades lo hacen por negocios, reuniones o trámites puntuales.
La sospecha es que hasta que Aerolíneas adquiera más aviones para los tramos de cabotaje podría suspender algunos de sus destinos. Otro que se rumorea que quedaría sin vuelos a partir de octubre próximo es nada menos que San Martín de los Andes.
De hecho, hace unos días el propio presidente de la compañía, Mariano Recalde, planteó que su meta para Aerolíneas es llevar el déficit operativo a cero y el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, anunció la compra de 20 aeronaves a la fabricante brasileña Embraer, nueve de los cuales llegarán al país durante el año próximo y el resto recién en el 2011.
Una bandera
Aerolíneas Argentinas es la mayor línea aérea de la Argentina. Desde su fundación en 1950 realiza tanto vuelos nacionales como internacionales. Es considerada la aerolínea de bandera argentina y una de las compañías más importantes de la región.
Sus bases de operaciones se encuentran en el Aeroparque Jorge Newbery del cual parten todos sus vuelos nacionales y algunos regionales, y en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza parte su red de destinos regionales e internacionales. Debido a las grandes distancias que existen entre sus dos aeropuertos bases, Aerolíneas no puede ofrecer un centro de conexiones destacado. Aerolíneas llega con su red de destinos a América del Sur, América del Norte, Europa y Oceanía.
La historia de la aerolínea se remonta al año 1929, cuando comenzó a operar la empresa Aeroposta. El Gobierno argentino, reconociendo la vasta amplitud de la geografía del país y la necesidad de contar con medios rápidos de comunicación entre el interior y las grandes ciudades, estableció una línea aérea para transportar pasajeros y correo. Los primeros dos destinos que sirvió Aeroposta fueron Mendoza y Posadas. Los franceses Jean Mermoz y Antoine de Saint-Exupéry se contaron entre sus primeros pilotos.
Para 1930, comenzaron a volar otras dos aerolíneas, Líneas Aéreas del Sudoeste y Líneas Aéreas del Noreste, y el número de ciudades argentinas servidas por rutas aéreas se triplicó. En 1945, LASO y LANE se fusionarón, convirtiéndose en Líneas Aéreas del Estado.
La formación de la nueva empresa pública fue vista como una medida tomada justo a tiempo, puesto que la Segunda Guerra Mundial estaba llegando a su fin y la aviación comercial estaba por entrar en una etapa de crecimiento explosivo. En 1946 llegaron a la Argentina los primeros Douglas DC-3 y se creó la primera línea intercontinental argentina, FAMA (Flota Aérea Mercante Argentina), de la cual el aviador Andrés Pedraza fue su primer piloto contratado.
En mayo de 1949 se fusionaron todas las líneas aéreas mencionadas anteriormente bajo el nombre de Aerolíneas Argentinas, que comenzó a operar el 7 de diciembre de 1950. Para este tiempo Argentina no contaba todavía con ningún aeropuerto de proporciones, por lo que el gobierno de Juan Domingo Perón construyó el Aeropuerto Internacional de Ezeiza para satisfacer esa necesidad.