El brusco salto del 4,2 por ciento en el valor de los alimentos y bebidas catapultó el índice y consolidó una tendencia que se registra desde octubre. Es la cifra más alta en tres años.
La inflación en la provincia de Santa Fe se disparó en diciembre de 2009 y llegó al 2,2 por ciento, la cifra mensual más alta de todo el año pasado. Los formadores de precios despliegan su voracidad remarcadora para resarcirse de los primeros meses de 2009, cuando la recesión económica puso límites a los aumentos.
La reducción de la demanda operada en los primeros meses del año como consecuencia del doble efecto de la crisis financiera y la sequía, impuso cierta contención a la inflación.
Prueba de ello es que, con excepción de agosto, la variación mensual de precios entre enero y octubre de 2009 estuvo siempre por debajo de la de 2008.
Este arrastre permitió que el aumento acumulado de los precios no pasara en 2009 del 13,5 por ciento en Santa Fe y del 13,9 por ciento en Rosario.
El índice de precios al consumidor que mide el Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec) es casi el doble del que cantó el Indec para todo 2009, del 7,7 por ciento.
Está más próximo, en cambio, a los índices anualizados relevados por las consultoras Buenos Aires City (15 por ciento) y Ecolatina (15,3 por ciento).
Entre diciembre de 2008 y el mismo mes de 2009, el rubro educación lideró la suba de precios, con un 18 por ciento. Alimentos y bebidas, por la remontada de los últimos meses, se ubicó en segundo lugar con un aumento del 17,2 por ciento.
Les siguieron los costos de los gastos de atención de la salud (14 por ciento) y los relacionados con la vivienda y servicios básicos (el rubro registra los movimientos de impuestos, tasas y tarifas), con un 13,4 por ciento.
Transporte y comunicaciones acumuló un incremento, en el mismo período, del 11,1 por ciento.
Teniendo en cuenta las expectativas inflacionarias para 2010, el aspecto más preocupante de la medición del Ipec es la dinámica alcista que tomaron los precios en el último trimestre del año, cuando acumularon una suba del 5 por ciento. Esto es más del doble que la inflación sumada en el mismo período del 2008.
La más alta en tres años
En diciembre, la ola remarcadora fue feroz. La suba de precios de 2,2 por ciento fue la más alta de los últimos tres años.
En Rosario, el último mes del año arrojó una inflación de 2,3 por ciento mientras que en la capital provincial fue del 2 por ciento.
Por lejos, el rubro alimentos y bebidas fue el gran protagonista de la escalada. En Rosario los precios de este segmento subieron 4,4 por ciento. Quedó muy por encima del rubro que ocupó el segundo lugar en el ranking, esparcimiento (1,8 por ciento), seguramente por la celebración de las fiestas de fin de año y el comienzo del período de vacaciones.
En cuanto a los números provinciales, la principal alza de precios en el mes de diciembre se registró en el rubro alimentos y bebidas (4,2 por ciento).
Siguieron subas en esparcimiento 2,1 por ciento; transporte y comunicaciones, 1,2 por ciento; atención médica y gastos para la salud, 1 por ciento; vivienda y servicios básicos, 0,4 por ciento; indumentaria, 0,2 por ciento; equipamiento y mantenimiento para el hogar, 0,4 por ciento; educación, 0,3 por ciento; y otros bienes y servicios, 1,1 por ciento, señaló el Ipec.
El conglomerado Santa Fe cerró el año con una presión menor de precios que en la ciudad de Rosario. La inflación de diciembre fue del 2 por ciento. Si se anualizan los precios, los rubros que más subieron fueron alimentos y gastos de salud.