Lo dijo la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien encabezó el acto en Tecnópolis, por el «Día de la Industria«. Afirmó que, en el comienzo del tercer centenario, como patria «seremos un actor principalísimo» en la economía mundial y que «necesitamos de los cuarenta millones de argentinos para hacerlo«.
En una cena anoche con presencia de autoridades nacionales, provinciales y representantes de los distintos sectores industriales, la mandataria adelantó que la recaudación del mes de agosto fue de $ 46.777 millones, con una variación interanual positiva del 35,4%.
Además, señaló que hubo un récord en materia de IVA, en el cual el sector industrial tuvo una participación histórica del 43% y advirtió que la manufactura tuvo participó en un 34 % de las ganancias, caracterizándolo de «gran aportante».
Recordó que ayer se cumplieron 55 años desde el ingreso de la Argentina al Fondo Monetario Internacional y que en ese tiempo se le había fijado una cuota similar a la del Brasil.
Detalló que luego devino un decrecimiento en el cual la industria local se vió fuertemente afectada. «Hoy somos un 30% de la economía del Brasil que se ha convertido, en buena hora, en uno de los gigantes de la economía mundial».
Recordó hitos en la historia de la manufactura nacional como el avión Pulki o el automovil Siam De Tella y expresó que no quiere «que sean piezas de museo», sino que sean «fotogramas de una película que tenemos que profundizar con desarrollo e innovación tecnológica».
Destacó la inauguración de la planta Vesuvio-Lacoste en San Juan, realizada ayer, y señaló que se están superando las antinomias de «mercado interno versus exportación» y que es necesario «industrializar la ruralidad», para que los productores «tengan mayor participación en la rentabilidad, generen mayor empleo en origen y la gente no tenga que reubicarse».
La jefa de Estado señaló que las PyMes participan en un 15% de las exportaciones, un 10% por sobre la media de la región, y detalló que el sector industrial tiene una alta participación en las exportaciones, llegando al 35%, superando las de origen agropecuario y primario: «Esto habla del desarrollo pujante que tiene el sector», agregó.
Expuso las metas del Plan 2020 y sostuvo que se buscará «recalentar la inversión para duplicar el PBI industrial, crear 1,5 millón de puestos de trabajo nuevos y bajar la tasa de desocupación al 5%». Además, se propuso sustituir importaciones por el equivalente al 45% de las importaciones actuales.
La Presidenta sostuvo que «no hay intereses contrapuestos entre los empresarios y los trabajadores»y que «debemos ser lo suficientemente inteligentes para no arruinar las bases del desarrollo argentino».
«La construcción de un país es paso a paso, con un avance permanente», subrayó y aseguró que «no hay una única estrategia», sino «la suma de muchas estrategias identificando sector por sector donde tenemos ventajas, dónde se necesita más Estado y dónde más mercado, para seguir profundizando esto que hemos logrado».
Destacó el crecimiento de la industria del software y adelantó que en los próximos días inaugurará las oficinas de una empresa nacional del sector que adquirió las acciones de una compañía norteamericana: «Una empresa argentina de software compró una norteamericana, ¿Quién lo hubiese pensado años atrás?», expresó.
«Tengo muchas esperanzas basadas en realidades concretas», manifestó la Presidenta y señaló que «tenemos que diversificar nuestra matriz productiva exportadora y agregarle mucho valor para seguir creciendo».
Resaltó el Programa de Financiamiento del Bicentenario, que ya lleva entregados 5.000 millones de pesos a la producción, y aseguró a los trabajadores que «seguirán sosteniendo el consumo y el poder adquisitivo».
«Hay que sumar a todos porque los necesitamos a todos para hacer esa Argentina que todos soñamos; no importa dónde militemos o hayamos estado antes, lo imprescindible es que estemos todos en esta Argentina que estamos construyendo entre todos», expresó.
Finalmente, Cristina manifestó que «Argentina es un país en el cual dan ganas de vivir» y que, «a pesar de los errores y desaciertos, el rumbo y el camino es el correcto» y que «ninguna sociedad puede subsistir o crecer si no tiene orgullo de ser y pertenecer».
Estuvieron presentes en el acto autoridades nacionales, provinciales, el presidente de la UIA, José De Mendiguren, quién precedió a la Presidenta en su discurso, y el secretario general de la CGT, Hugo Moyano, quién también dirigió unas palabras al público, e invitados especiales, después del discurso de la Presidenta. Moyano apoyó vivamente el modelo socioeconómico que desarrolla esta gestión.
La CGT y la UIA firmaron, a su vez, un acuerdo para la capacitación conjunta de dirigentes.
Fuente Sala de Prensa – Presidencia de la Nación