El presidente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, Carlos Casamiquela, aseguró hoy que «la lluvia trae alivio», y que muchos cultivos se recuperarán. Había comenzado a llover en el centro de Santa Fe, Entre Ríos, este de Buenos Aires, noroeste de Río Negro, La Pampa y Córdoba.
El funcionario indicó, esta mañana en radio La Red, que la lluvia «trae alivio en aquellos lugares, que producto de la sequía, los cultivos necesitaban agua y que seguramente con estas lluvias se van a recuperar».
Sin embargo, Casamiquela afirmó que «algunos lugares en donde los cultivos estaban perdidos, por más que llueva, van a ser irrecuperables» y que hasta algunos los productores usan los cultivos perdidos como alimento para el ganado.
«Hay una especulación de algunos productores, que es interesante lo que están planteando, que es aprovechar esta lluvia para intentar la siembra tardía de algunos cultivos, como soja, que se cosechen hacia julio y junio», dijo.
El titular del INTA reiteró que «la situación mejora lo que nos encontrábamos discutiendo cuatro o cinco días atrás, en donde se vaticinaba una situación muy crítica, que se evaluará en el futuro, pero que hay que evaluarla previamente con el impacto de esta lluvia».
En este sentido, dijo que es fundamental evaluar el estado de humedad del suelo, del desarrollo del cultivo, del pronóstico, como también los milímetros de agua caída.
«El impacto de la sequía y de la lluvia se va a poder hacer con seriedad dentro de 10 días. Las personas que hicieron algún pronóstico de pérdida de cosecha, la semana pasada, la valoración económica la hacen pensando que no va a llover. Ahora llueve y cambia el panorama», afirmó.
Por último, Casamiquela subrayó que el ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, le encomendó realizar un informe del impacto de la sequía «partido por partido, y de cada provincia, para poder hacer una evaluación más detallada».