Las aspiraciones de los estatales no se atarán a lo que diga la Nación, ni a lo que acuerden otros gremios ante el Estado nacional. Los dirigentes gremiales sostienen que el diálogo será fructífero.
Con los fotógrafos y los camarógrafos en las escalinatas del reluciente hall de la Casa Gris, Alberto Maguid y Jorge Hoffmann esperaron -pacientes en un diálogo de circunstancias- que el círculo que formaron con otros dirigentes que los secundan fuera retratado desde arriba.
A Hoffmann y a Maguid les bastó con mirarse para saber qué iba decir cada uno. Tenían un libreto pautado y no se apartaron del pliego de coincidencias que le llevaron al ministro de Gobierno, Rubén Galassi, que pretende una recomposición que va del 20 al 25 % según la más optimistas de las expresiones, o es “no inferior al 20”, de acuerdo con quienes miran -pesimistas- la mitad vacía del vaso agrietado de las cuentas fiscales.
Las conducciones de ATE y UPCN acordaron llevar el mismo tono a la rueda de prensa anterior a la primera reunión con el gobierno: prudencia en las expresiones y firmeza sobre las cifras con que se busca recomponer el salario de los trabajadores de la administración pública provincial.
La otra clave es desligar la discusión local de lo que ocurra en otros ámbitos. A unos más que a otros incomoda la suerte de techo que ensayó el gobierno nacional, del 18 %, o la puja salarial que pueda desatarse entre el Ejecutivo Nacional y la actual conducción de la CGT.
Por lo pronto, de lo que ocurre con la pulseada por el ingreso en el ámbito privado los gremios estatales locales tomaron un ingrediente difundido por estos días en los diarios de Buenos Aires: en julio se vuelve a revisar todo. (En rigor, la ley de paritarias santafesina habilita la discusión permanente, sin necesidad de atarse al calendario).

Tiempos

Los dirigentes gremiales habían pedido una postergación del inicio de las paritarias, el martes pasado, cuando se iniciaron las conversaciones entre el gobierno de Antonio Bonfatti y los gremios docentes. Los sindicatos de los empleados públicos dijeron que debían antes de sentarse a conversar con los funcionarios cerrar puntos de vista sobre componentes salariales e ítems especiales que terminan por influir en el haber final.
La semana pasada se especuló con la idea de que los paritarios estatales hubieran preferido ver qué ocurre con la discusión salarial paralela que, a nivel nacional, sostienen los docentes con la administración de Cristina Fernández de Kirchner.Hoy, tanto Hoffmann como Maguid dijeron que no habrá un ojo puesto en lo que digan los acuerdos nacionales y subrayaron que allí el debate tiene un componente distinto: se discute una parámetro nacional que los dirigentes optan por ver como una suerte de piso.
Unos minutos antes de subir al primer piso de la sede del Ejecutivo provincial, los titulares de los sindicatos del sector público insistieron en que la posición que llevan los trabajadores es prudente y atada a la realidad de la inflación y bajo el deseo de obtener una mejora en los haberes que supere el aumento de los precios.
Ambos se negaron a dar demasiados detalles sobre la realidad económica del gobierno santafesino, al que la oposición justicialista le augura una crisis de pagos y caída de la obra pública a la vuelta de la esquina.
Ayer, en declaraciones a un medio de Rosario, Maguid advirtió: “No me importa si el gobierno tiene o pide prestado”, para afrontar el pago de salarios y los aumentos. Hoy, en cambio, optó por señalar que “no me corresponde decir si el gobierno tiene o no problemas económicos, nuestra obligación es señalar los problemas económicos, los deseos y sobre todo las necesidades de los afiliados”.

Expectativas

Hoffmann destacó que lo que solicitan “se ata a la realidad económica del Estado y de los trabajadores”. Afirmó que si los números de la provincia no son buenos, no será “un problema ni de ATE, ni de UPCN”. Agregó que “nosotros tenemos una responsabilidad frente a la sociedad y sobre todo al conjunto de los trabajadores, nuestro planteo salarial naturalmente va a considerar las cuentas públicas. Y vamos al cabo de ver los números del propio presupuesto”.
Un periodista preguntó por versiones que dudan sobre el pago de los salarios. Maguid y Hoffmann fueron terminantes: “Es cuanto menos imprudente que nosotros nos hagamos eco de algo así, no queremos y mucho menos creemos que algo así pueda ocurrir”, dijo el de ATE. “Sería una falta de respeto que abundáramos sobre eso”, agregó el de UPCN.
“Tenemos buenas expectativas. Siempre hemos ido así a las convocatorias. Siempre hubo responsabilidad de ambas partes y en todo momento hemos tratado de encontrar en el diálogo una solución posible”, sostuvo. Y comentó: “Vamos con esperanza. Si la propuesta es razonable lo dirán los afiliados. No vamos a acordar nada que no aprueben las bases”.
Maguid y Hoffmann remarcaron que esperan que de la reunión pactada en el ministerio de Gobierno y Reforma del Estado en Santa Fe salgan “propuestas positivas. Nos conocemos desde hace cuatro años, son los mismos, así que no creo que haya grandes variaciones”, dijeron.

Fuente El Litoral