Arrancó la semana a U$S 490 la tonelada en Chicago. Se espera una producción para la actual campaña de unos 46 millones de toneladas.
La soja parece decidida a mantener el rally alcista que atraviesa en las últimas tres semanas. Arrancó la semana en Chicago en nuevos máximos para los últimos cinco meses, a U$S 490 la tonelada. Y si bien los analistas estiman que puede haber alguna que otra toma de ganancias, el próximo escalón -U$S 500- aparece como más cercano y, a la vez, esboza un poco de tranquilidad tanto para el sector agrícola local como para el gobierno.
Es que el repunte de casi 20% desde los mínimos que la oleaginosa registró a mediados de diciembre, y que es de 10% durante todo febrero, mejoró mucho la ecuación en término de ingreso esperado de divisas y de lo que el país se perdió de ganar por el recorte productivo que dejó la falta de lluvias registrada entre diciembre y enero, en plena etapa de crecimiento de los lotes sembrados con la oleaginosa.
Los expertos consideran que todavía faltaría que la cotización internacional dé otro salto del 10% para que el país obtenga ingresos similares a los que esperaba contar durante 2012. Antes del inicio de la campaña y cuando se aprobó el Presupuesto 2012 (donde se estableció un valor promedio para la soja de U$S 486 la tonelada), se esperaba una producción para la actual cosecha de 50 millones de toneladas. A precios del cierre del viernes, esa cantidad representa un valor de cosecha de U$S 24.500 millones, lo que dejaría U$S 8.700 millones en concepto de retenciones.

Lo negativo

Pero la sequía hizo que hubiera recortes en las previsiones de cosecha y por ende de ingresos. Las estimaciones de los privados y del propio gobierno apuntan a una producción en torno a 45 millones de toneladas (entre 44,5 millones y 46 millones). A los valores del viernes (U$S 490), el valor de la cosecha es de U$S 22.500 millones. Esa cantidad le otorgaría al Fisco un ingreso por retenciones de U$S 7.800 millones.
De esa manera, se recortó a U$S 2.000 millones lo que se perdió de valor de cosecha, principalmente por el efecto precio.
Pero si el clima acompaña hacia fines de marzo y abril (las heladas podrían diezmar las sojas sembradas de manera tardía), se logrará recolectar 45 millones de toneladas.
Hoy, el mercado estima factible que la oleaginosa se ubique en torno a U$S 520 la tonelada para junio. No obstante, para eso será fundamental que se mantengan las condiciones de ajustados stocks para una sostenida demanda.

Fuente El Litoral