Unión perdió 3 a 1 en su visita a Newell’s en Rosario, que con este triunfo se mantiene como puntero del Clausura. Los goles del local llegaron todos en la primera mitad (Figueroa, Vergini y Urruti), cuando el rojiblanco fue ampliamente superado. El Tate mejoró en el segundo tiempo y llegó al descuento (Donnet), pero nunca puso en peligro la victoria de la Lepra. Fue expulsado Avendaño.
Los goles del conjunto local llegaron todos en el primer tiempo, a los 5’, 38’ y 41’, lo que prácticamente le bajó la persiana al encuentro.
Durante esa etapa el equipo santafesino fue claramente superado, jugó mal y no encontró nunca los caminos. Mientras, en el complemento mejoró su producción, pero lejos estuvo de poner en peligro el triunfo del rojinegro, que controló sin inconvenientes el trámite del juego.
Ya desde el comienzo del partido Newell’s se adueñó de la pelota y ejerció la presión que los equipos que son locales suelen meter en el comienzo. Y sacaron provecho de ello en la primera llegada clara que tuvieron, a los 5’, luego de recuperar la pelota cerca de su propia área y, tras una buena jugada, dejar habilitado a Víctor Figeroa que con un remate fuerte y cruzado puso el 1 a 0.
Tras la apertura del marcador, el dueño de casa siguió merodeando el área Tatengue y tuvo aproximaciones de riesgo. La más peligrosa fue a los 21’ cuando tras un centro desde la derecha, primero Pérez y luego Urruti remataron al arco de Bologna, pero en ambas oportunidades la pelota terminó rebotando en piernas rivales.
Newell’s dominaba las acciones en el medio y desde allí pasaba rápido al ataque, poniendo a la defensa de Unión siempre al límite. Mientras, los de Kudelka trataron por momentos de equilibrar las acciones, pero casi no llegaron a preocupar a Peratta. El medio casi no tenía contención, y la defensa hacía lo que podía ante cada embate “leproso”.
A los 30’ fue Urruti el que volvió a avisar con un cabezazo de espaldas al arco que obligó a una buena intervención de Bologna. Y a los 36’ el mismo jugador, tras un centro desde la derecha, volvió a cabecear cruzado al segundo palo, pero esta vez salió desviado.
Hasta que a los 38’ el local volvió a marcar: desde la media luna del área habilitaron a Vergini, que ingresó en diagonal al área y sacó un violento disparo cruzado que fue a parar a la red, estableciendo un 2 a 0 justificado de acuerdo al trámite del juego.
Y a los 41’ llegó un golpe de nocaut cuando Newell’s se puso 3-0 tras un tiro de esquina. Desde el córner vino un centro, hubo dos cabezazos dentro del área, el segundo rebotó en el travesaño y Urruti apareció sólo para convertir el tercero de su equipo.
Recién en tiempo de descuento se pudo contabilizar la primera chance de gol concreta que tuvo Unión, cuando Rosales apareció por atrás para cabecear un centro, pero la pelota dio en el travesaño y salió por arriba.
Un poco mejor, pero nada más…
En el complemento, el rojinegro avisó a los 3’ con una buena jugada de Figueroa por la izquierda, que terminó con un tiro que contuvo Bologna.
Pero tras un comienzo en el que parecía que todo sería como la primera mitad, Unión llegó al descuento que abrió la ilusión. Iban 12’ cuando el rojiblanco recuperó la pelota cerca del área rival y la jugaron para Donnet, que con espacio y tiempo, desde fuera del área sacó un preciso remate que se metió pegado al palo. Una gran ejecución para hacer estéril la volada del arquero.
El encuentro se planteaba con Unión tratando de achicar la diferencia, y Newell’s jugando tranquilo y ordenado, pero sin replegarse, por lo que a los de Kudelka no les resultaba sencillo llegar.
A los 18’, otra vez Figeroa esquivó piernas rivales para sacar un tiro desde la izquierda que se fue muy cerca del palo más lejano.
Ya llegando a la media hora de juego, y cuando el Tate había llegado con riesgo en busca de un nuevo descuento, el local metió una buena contra que dejó a Sperdutti mano a mano con el arquero y corriendo apareado con un defensor, pero al ingresar al área sacó un remate que se fue alto.
Finalmente, a los 43’ fue Barrales el que se perdió un mano a mano increíble tras un error grosero de la defensa local, situación que fue salvada de manera notable por Peratta.
Así se cerró el partido, con otra actuación que dejó mucha preocupación, porque el equipo no tuvo la reacción que sí mostró en otras oportunidades, le hicieron siete goles en dos partidos (ambos de visitante y contra rivales encumbrados en las posiciones) y perdió para el próximo juego a Avendaño, que se fue expulsado. Mucho trabajo tendrá Kudelka durante la semana.
Fuente El Litoral