Anoche, los ruralistas manifestaron su oposición a lo que denominaron un “impuestazo”. Con la emergencia agropecuaria, todavía vigente en varios departamentos, advirtieron las nefastas consecuencias del proyecto.
“Tenemos una gran preocupación”, comenzó diciendo Hugo Iturraspe, presidente de la entidad ruralista. Y agregó: “Somos conscientes de que (el impuesto) ha quedado un poco bajo de acuerdo a la inflación del país. El campo siempre ha pagado sus impuestos y lo quiere seguir haciendo. Pero esta reforma tributaria se debe consensuar, no se puede sacar de la noche a la mañana, por una necesidad de caja de la provincia”, agregó.
Fue anoche, en el marco de una conferencia de prensa realizada en la sede de la entidad que responde a Carsfe a nivel provincial y a CRA en el plano nacional. Allí, los representantes ruralistas hicieron un análisis de la situación tranqueras adentro, donde detallaron el golpe que recibieron por la falta de precipitaciones en enero, que provocó una merma en los rindes de los granos, la que se está confirmando al cierre de la cosecha de soja y maíz. “Venimos saliendo de una sequía, y de los 52 millones de toneladas de soja de la campaña anterior con suerte llegaremos a las 40”, proyectaron.
Reclamo de fondo
Para los representantes de la producción, el esquema que desequilibra la balanza es de fondo, y radica en un injusto esquema de coparticipación federal. “El 64 % de la coparticipación que la provincia debería recibir no está llegando en tiempo y forma, y creemos que debemos poner mayor énfasis en reforzar el federalismo. Con el aumento del inmobiliario no se puede reemplazar ese déficit”, explicó Iturraspe.
Finalmente, remarcaron que si aumenta el avalúo se terminará beneficiando a la Nación en detrimento de los intereses de la provincia. “Es imposible que el campo pague como un bien inmobiliario y no de producción”, destacaron.
Asamblea caliente
Anoche, en la Sociedad Rural de Pergamino (Buenos Aires) se realizó una asamblea convocada por la Mesa de Enlace provincial, que contó con la presencia de más de 600 productores autoconvocados y afiliados de las entidades agropecuarias. “El campo quiere dialogar; esta medida es una coparticipación a la inversa que terminará haciéndonos desaparecer a los productores”, manifestaron. “Gran parte del aumento es para recaudar fondos para el Estado Nacional, no para la Provincia o los Municipios, como se quiere hacer creer a la sociedad”, agregaron. Finalmente, expresaron que “en caso de aprobarse, (el aumento) no sólo afectará al campo, sino a toda la población, ya que aumentará el sellado, los ingresos brutos y muchísimos bienes de consumo diario. Sólo queremos producir, honrar la cultura del trabajo” concluyeron.
Fuente El Litoral