El 13 de febrero, Marcela Chiaro habría sido asesinada en una situación que se supone muy violenta.
Fue en la capital de Tucumán. Habría estado allí Luis Corral, su marido, acusado del crimen, detenido, y Paola Castro, una salteña, vinculada como partícipe necesaria.
La joven Correa, es de Salta, y en diciembre habría dado a luz un hijo que dice es de Corral.
Los investigadores lograron conseguir pruebas como sangre en la casa de la amante -que es de los Corral-, la camioneta de la familia Corral-Chiaro y la veterinaria familiar, dado que el acusado es médico veterinario y la esperancina víctima ingeniera agrónoma, egresados de las facultades de nuestra ciudad donde se conocieron.
Los Corral-Chiaro vivían en Tucumán desde hace 5 años y tuvieron una nena de 2 años y medio, que hoy está con su madrina, Rosana Chiaro, hermana de Marcela, en Esperanza.
La investigación avanzó junto con las marchas en Tucumán.
Los amantes permanecen detenidos acusados del crimen, cuyo cuerpo no se encuentra.
Pero las sorpresas llegan casi a diario.
Primero fueron detenidos los padres de Paola Castro, acusados de encubrimiento.
Luego, apareció quien sería Liliana Britos, también amante de Luis Corral, se especula, que permanece detenida.
Con ella ya son cinco quienes están tras las rejas.
Pero hay más. Como dijimos, la Justicia apresó a un tal Saguir, empresario forrajero, por encubrimiento agravado porque le habrían encontrado un celular con llamadas comprometedoras.
Luego fue a parar tras las rejas un ayudante de Luis Corral en la veterinaria, un tal Emilio, que sería, para sorpresa de todos, un amante de Corral, se dice.
La Justicia ahora, pone preso a un taxista, que se apellidaría García, quien también tendría gustos homosexuales y vínculos afectivos con el «empleado» de la Veterinaria.
Si se suman, ya los detenidos suman tres mujeres, las dos amantes y la madre de una de ellas, y cinco hombres, el padre de la amante, el forrajero, el empleado de la veterinaria, el taxista que sería travesti en las fiestas nocturnas, y el propio Luis Corral.
Y se dice que también los padres de algunos de ellos, estarían prófugos.
Noticias vinculadas al caso, aseguraron en horas recientes, que en esta semana podría haber importantes novedades, dado que los investigadores -que tomaron con mucha profesionalidad y dedicación este crimen de la mujer esperancina- estarían tras una pista que importaría y mucho al esclarecimiento definitivo de la muerte y desaparición de Marcela Chiaro.
Calvario sin final
Como se dijo, Marcela Chiaro habría sido asesinada en la casa donde vivía Paola Castro, transportada en la camioneta de Corral hasta la veterinaria y desde allí se pierde el rastro de su cuerpo.
Ninguno de los detenidos dice donde está.
Sin embargo, los investigadores descubrieron en la computadora del veterinario Corral, que este sujeto investigó los poderes de la lavandina para limpiar manchas de sangre y otros elementos para lavar y hacer desaparecer cuerpos.
Algunos temen que el cuerpo de Marcela Chiaro pudo haber sido cremado. Sin embargo eso no es tan simple, porque debe tener registros legales y no en cualquier parte se puede hacer, debido al régimen de control que existe en la materia. Incluso si se tratara de cuerpos de animales domésticos, la situación plantea que debiera hacerse con un enorme compromiso para la empresa que ejecutara tal situación. No hay que olvidar el caso de los García Belsunce en Buenos Aires, donde se pretendió cremar el cuerpo, «en negro», hecho que fue denegado por la funeraria, o en otro más reciente donde una mujer mató a su marido, se pretendió cremarlo y está detenida junto al médico que autorizó tal situación.
El cuerpo en Salta
Mientras tanto, los estudios criminalísticos sobre la identidad de la mujer encontrada descuartizada y enterrada al borde de una ruta en la provincia de Salta siguen adelante.
En un principio, de las 17 mujeres desaparecidas en esa provincia y otras de las provincias convecinas, quedaron tres por razones de similitudes, altura, dentadura, color de cabellera, entre otros detalles, como la edad.
Una de ellas es la desaparecida Marcela Chiaro.
Por lo pronto, se está haciendo una reconstrucción en arcilla, del rostro que habría tenido la mujer en vida.
Eso llevará tiempo, aseguran desde fuentes cercanas a los hechos.
La Justicia forense también está procurando muestras de ADN del cadáver -generalmente entre las piezas dentarias hay sangre y desde allí se toman las muestras en ciertos casos- para comparalas con las de las mujeres desaparecidas.
Es de prever que los resultados por lo menos demorarán unos 30 días a 60 días.
Mientras tanto, la familia Chiaro, sus padres y dos hijas, junto a su nieta, permanecen en nuestra ciudad a la espera de novedades en las últimas horas o lo que quede de tiempo hasta el juicio oral.
Lo que se supone es que hasta que no haya novedades, no viajarán hasta Tucumán, y si no surgieran, seguramente hasta que la Justicia comience con el juicio oral, a los por ahora, ocho detenidos que tiene la causa.
La pequeña entre nosotros
Por lo pronto, con excelente criterio, la Justicia de Menores de la provincia de Tucumán, decidió, como se informara oportunamente, que la hija de Marcela Chiaro sea criada por la familia de su madre.
La niña ya se encuentra entre nosotros en la casa de sus abuelos y de su madrina, Rosana Chiaro, con el cariño además de ellos, de Jaquelina, la otra hermana de Marcela.
Fuente El Colono del Oeste