Acostumbrado a las «batallas cívicas«, Humboldt construye su propio hospital. Liderado por la Comuna, los vecinos organizados construyen lo que para otros sería lo más cercano a un imposible. En el año 2010, se produjo el cierre del sanatorio y la comunidad quedó en absoluto desamparo. Hoy, la comunidad edifica una respuesta desde la salud pública.
Humboldt (Enviados Especiales) – En un año y medio la Comuna pagó 255 mil pesos para la salud, volcado ese dinero al SAMCo de Humboldt. Las nuevas obras que se construyen cuestan 350 mil pesos, con servicio de energía eléctrica, agua y red de gas.
La comisión Pro Obras necesita antes de octubre 120 mil pesos y trabaja en constantes beneficios que deben estar antes de ese mes cuando se inauguren las primeras obras, como «regalo» para la comunidad por un nuevo aniversario de fundación.
La Asociación Cooperadora tiene 430 socios con cuotas de 12 pesos y lo invierte todo en el SAMCo.
Adrián Bender, presidente comunal, presidió la reunión con la presencia de  las autoridades de la Comisión Pro Obras, la Asociación Cooperadora, autoridades médicas el Dip. Germán Kahlow  y responsables de la construcción.
Y ante los ojos de los presentes se mostró un proyecto que a primera vista parece  increíble, pero quien conoce a Humboldt sabe que está acostumbrado a los milagros comunitarios, como lo fue llevar la red de gas -con jornadas épicas en Buenos Aires- y construir su propia estación de ómnibus inaugurada el año pasado.
Para la proximidad se pretende una sala de rayos, con equipamiento donado y también entre el 2012 y el 2013 se  quieren instalar doce camas, seis por año.
Actualmente hay dos y como anecdotario, sirve decir que días pasados dos abuelas visitaron el hospital y donaron los colchones hospitalarios y ropa blanca.
Así trabaja de forma solidaria la comunidad, con algunas piedras en el camino, pero lo que se pretende es que la salud pública pueda reemplazar a la privada del sanatorio que cerró en el año 2010 cuando se produjo una debacle sanitaria gravísima que la Comuna tomó en sus manos con aportes económicos que significaron entre 12 y 15 mil pesos mensuales.
Esta comunidad, de algo más de 5 mil habitantes acostumbrada a los tremendos desafíos por crecer, con ayuda de subsidios del senador Rubén Pirola y el diputado Germán Kahlow, pero básicamente guiada por una fe inquebrantable y un pasado cargado de glorias cívicas, toma el tremendo desafío de construir su propio hospital. Lo que para otras comunidades  podría ser un imposible, para esta sociedad no lo es. Tal vez por eso la reunión  con la prensa de la región terminó con todos de pie y una oración del Pastor Evangélico.
La idea es seguir creciendo hasta tener un hospital con todos los servicios. Por lo pronto el personal médico y enfermeras, más el restante sirve para los servicios mínimos con guardias pasaivas las 24 horas. Se quiere tener un servicio de emergencias acorde y una sala quirúrjica como proyecto más próximo.
Estuvieron presentes  en la mesa cabecera Adrián Bender, presidente comunal, el Dip. provincial Germán Kahlow,  Marcelo Weiner, del Consejo Ejecutivo, el doctor Oscar Arnold, Director del SAMCo, el Pastor Mario González del Grupo Pro Obras, Carlos Jullier, de la comisión de la Asociación Cooperadora, Danilo Nagel, vicepresidente comunal y Víctor Zhender, responsable del proyecto constructivo.

Fuente El Colono del Oeste