El campeón defensor del fútbol argentino. Alejandro Limia se hizo el gol en contra a poco de comenzado el primer tiempo y tras un error cuando salió a cortar un centro. Luego el arquero se tomó revancha al atajar un penal. En un partido equilibrado, al equipo de Kudelka le faltó peso ofensivo para llegar a la igualdad.
Unión perdió esta noche 1 a 0 en su visita a Arsenal, partido que marcó el comienzo del Torneo Inicial en un renovado fútbol argentino de Primera división.
El único gol lo marcó Limia en contra a los 8 minutos de juego, en un encuentro que en líneas generales fue equilibrado, con más llegadas por parte del local y un equipo tatengue que mostró carencias a la hora de atacar.
Un error de Limia puso al local en ventaja: llegó un centro “bombeado” al segundo palo y el arquero salió a quedarse con la pelota, pero se le escapó y terminó metiéndose en su propia valla. Hasta allí había pasado poco y la lluvia y un campo encharcado hacían prever un partido poco atractivo.
Sin embargo, tras el gol reaccionó Unión y tuvo buenas aproximaciones con dos situaciones claras. La primera fue un minuto después de la apertura del marcador, cuando Núñez tocó la pelota tras un centro, pero llegó muy exigido y el tiro se fue desviado. A los 14’ vino otro centro y esta vez Mazacotte, de espaldas al arco, apenas alcanzó a desviar el balón, cabezazo que salió muy cerca del palo más alejado del arquero.
Dado el estado del campo de juego, era lógico que la mayoría de las situaciones llegaran por arriba. Así estuvo cerca de aumentar Arsenal con otros dos cabezazos. Primero de Lugüercio a los 19’ y luego de Lisandro López a los 22’, en ambos casos con muy buenas intervenciones de Limia.
Por la misma vía llegó, a los 32’, una nueva chance para el dueño de casa, cuando Aguirre desde el borde del área metió un “testazo” que se fue afuera.
Y a los 37’ llegó un penal favorable a Arsenal, decisión arbitral que dejó poco para la discusión y que ejecutó Emilio Zelaya, pero Limia tendría su redención de aquella acción que le costó el gol, desviando el tiro del delantero.
Ya cerca del final Braghieri (también por arriba) puso en riesgo la valla del tatengue. Y un minuto después respondió Unión, que tuvo su mejor situación de todo el partido en los pies de Jara, que sacó un violento remate al primer palo, tiro que se estrelló en el poste.
Pero la primera mitad finalizó 1 a 0. Fue una etapa atractiva, en el que los locales tuvieron más oportunidades con varios centros y ganando por arriba. En tanto el conjunto santafesino llegó menos pero lo hizo también con peligro, siendo Limia el gran protagonista.
No encontró los caminos
En el inicio del complemento, rápidamente Arsenal puso en riesgo el arco de Unión cuando quedó una pelota boyando dentro del área y Braghieri, a los 2’, sacó un remate que Mazacotte despejó sobre la línea.
El local se adueñó de la pelota y manejó con comodidad el trámite del encuentro, aunque no volvió a llegar con peligro al arco de Limia. Mientras, el Tate jugó muy lejos del arco defendido por Campestrini. Recién a los 22’ los de Kudelka tuvieron su primera situación de gol, cuando desde un tiro libre lejano, y aprovechando que todos esperaban el centro, Alemán sacó un tiro bajo al primer palo que sorprendió a todos, menos al guardavalla, que mandó la pelota al corner.
Fueron unos pocos minutos en los que el equipo rojiblanco se mostró más adelantado e incisivo que el rival, pero salvo aquel tiro libre y alguna aproximación más, no motivó mayores preocupaciones para el dueño de casa, que en el tramo final volvió a controlar las acciones, ya en un segundo tiempo menos atractivo que los primeros 45 minutos, y con un campo de juego que, si bien aguantó el agua caída, con el uso y la lluvia constante se fue poniendo más “pesado” y difícil para jugar, lo que actuó en favor del equipo que tenía la ventaja y que terminó llevándose los tres puntos.
Fuente El Litoral