Dos condenas y una absolución en el juicio por el uso de agroquímicos en Córdoba. El productor Francisco Parra y el aviador Edgardo Pancello fueron sentenciados a 3 años de prisión condicional; no irán a la cárcel. Los inhabilitaron para usar agroquímicos y harán tareas comunitarias. El ruralista Jorge Gabrielli, libre de culpa.
La Cámara Primera del Crimen de Córdoba condenó ayer a tres años de prisión, de ejecución condicional, al productor agropecuario Francisco Parra y al aviador Edgardo Pancello en el marco del juicio por fumigaciones en campos próximos a barrio Ituzaingó Anexo, al mismo tiempo que absolvió al ruralista Jorge Alberto Gabrielli.
Tras un extenso debate, los jueces Lorenzo Rodríguez, Mario Capdevila y Susana Cordi Moreno encontraron culpable a Parra, por unanimidad, del uso de residuos peligrosos de manera continuada. En tanto, la responsabilidad de Pancello fue adjudicada por mayoría.
Los magistrados decidieron, además, que ambos condenados estarán inhabilitados por ocho años para utilizar agroquímicos.
Por otra parte, los sentenciados deberán realizar tareas comunitarias, durante cuatro años y por 10 horas semanales, en instituciones vinculadas con la salud.
Tras conocerse el fallo, que era aguardado con ansiedad en las afueras de Tribunales II por un grupo de ambientalistas y varias organizaciones no gubernamentales, la Fiscalía se mostró conforme, porque se reconoció que existió delito, mientras que los abogados de los acusados señalaron que casarán la sentencia.
A través de la sentencia, los jueces determinaron que hubo delito en la manera en que se aplicaron las fumigaciones y podría sentar un precedente para la protección del medioambiente.
De todos modos, los familiares de las personas afectadas por la contaminación se mostraron disconformes con el fallo y aseguraron que no se hizo justicia.
Cabe destacar que en esta causa no se juzgó si hubo relación entre las fumigaciones y las enfermedades y muertes denunciadas por los vecinos de barrio Ituzaingó Anexo. Esa cuestión será debatida en otro juicio.
El proceso por contaminación
El juicio comenzó el 11 de junio y tuvo como imputados a dos productores agropecuarios, Francisco Parra y Jorge Alberto Gabrielli, y al piloto fumigador Edgardo Jorge Pancello.
Los acusados estaban sindicados de contaminar con agroquímicos, mediante fumigaciones clandestinas en sembradíos de soja, zonas cercanas al barrio capitalino de Ituzaingó y alrededores.
En los alegatos, el fiscal Marcelo Corvalán había pedido cuatro años de prisión para Parra y tres años para Pancello, en ambos casos como autores responsables de “contaminación ambiental”.
Para Gabrielli, en tanto, había solicitado la absolución, al considerar que no existen pruebas determinantes para sostener la acusación.
En forma subsidiaria, y en caso de que el tribunal impusiera penas de prisión pero de ejecución condicional, el fiscal había pedido que a los dos acusados se les impusiera que, durante cuatro años, presten funciones gratuitas, de lunes a viernes, en un dispensario público o en el Hospital Oncológico.
Por su parte, los abogados defensores de los tres acusados habían solicitado la absolución de los cargos.
Según la causa elevada a juicio, Gabrielli y Parra son los dueños de los campos de soja y habían contratado a Pancello para fumigar los sembradíos con glifosato y endosulfan, agroquímicos que son consideradas sustancias peligrosas para la vida humana.
Informe de Andrés Carpio y Pablo Cristino – Cadena3.com