El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) presentó en Mar del Plata el «Kit de Buenas Prácticas para una Ganadería Sustentable de Pastizal». El objetivo es producir con altos índices y conservando los recursos naturales.
La propuesta de aprovechar estratégicamente la diversidad que poseen los pastizales naturales y, simultáneamente, lograr altos índices productivos, tuvo una respuesta altamente favorable por parte de los numerosos medios, los productores y los técnicos que asistieron al lanzamiento del “Kit de Buenas Prácticas para una Ganadería Sustentable de Pastizal”.
La propuesta presentada en Mar del Plata por Francisco Anglesio, vicepresidente del INTA; Diego Moreno, director general de la Fundación Vida Silvestre, y Hugo Nigro, director de la EEA Cuenca del Salado, consiste en un combo que incluye materiales elaborados por profesionales expertos en temáticas medioambientales y productivas, resultado de un proyecto impulsado por el Instituto, la Fundación y Aves Argentina.
“La ganadería sustentable supone pensar cómo ponerle valor a toda la fauna de nuestras regiones, como en el caso de la Cuenca del Salado, y nosotros como Estado estamos junto a las organizaciones y a los productores para mejorar la calidad de vida”, expresó Anglesio.
Por su parte, Moreno remarcó que la institución que representa viene trabajando desde hace años muy comprometida con el manejo y la conservación de pastizales “y lo hemos hecho con una mirada que, como muestra este kit, asocia el tema de la conservación de recursos y la diversidad con la producción”.
El compilador de los materiales que componen el kit fue Fernando Miñarro, coordinador del Programa de Pastizales de la Fundación Vida Silvestre, quien también fue el encargado de brindar detalles sobre los objetivos del proyecto.
En la presentación destacó la importancia de contar con profesionales de INTA, CREA y Fauba para poner este material al alcance de los productores. “Comenzamos con el desarrollo de un modelo sustentable, que se basa en entender cómo son las bases ecológicas de estos sistemas para después manejarlo de buena manera”, señaló y luego agregó que “las buenas prácticas generan diversidad y mayor estabilidad al sistema”.
Fuente INTA Informa