Funciona el transporte de pasajeros y es normal la actividad en las escuelas y la administración pública. Pero no hay bancos ni recolección de residuos.
Las delegaciones locales de bancarios, camioneros, gastronómicos, de la carne, judiciales nacionales, empleados de correos, panaderos, personal legislativo provincial, peones rurales y cerveceros adhieren al paro nacional que lanzó la CGT que conduce Hugo Moyano y la CTA de Hugo Miceli, por lo cual mañana -entre otras cosas- no habrá actividad bancaria ni recolección de residuos.
Donde la actividad será normal serán en la administración pública nacional y municipal ya que UPCN, ATE, Amsafe (a excepción de Rosario), Sadop y Asoem no adhieren a la medida de fuerza.
Los que sí adherirán al paro -vinculados con el sector público- serán los médicos agrupados en Amra, que no concurrirán a sus lugares de trabajo pero mantendrán las guardias mínimas.
Los reclamos de vieja data sobre los cuales se apoya el paro nacional son el reclamo por el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, la universalización de las asignaciones familiares, aumento salarial de emergencia para los jubilados de todo el país y el rechazo a las modificaciones a la ley ART que -según los gremios- está hecha a favor de los empresarios.
Desde la CGT Santa Fe aclararon que la adhesión al paro no surgió orgánicamente desde la Regional, sino que es individual por parte de cada gremio y respetarán la decisión que cada uno de los gremios tomen en función del posicionamiento que tengan.

Profundizar las medidas

Por su parte, el titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, advirtió que si el gobierno no da “respuesta” a los reclamos que llevó al sindicalismo opositor a convocar la huelga general de mañana “tendrá que venir un paro de 36 horas con movilización”.
“Si el gobierno no tomó nota de la multitud que hubo pacíficamente en todo el país el 8 de noviembre y si no toma registro de esto, indudablemente estamos con una presidenta, que es lo que sospechan todos: va para adelante, no le importa nada y hace lo que ella quiere”, alertó.
“Este gobierno que dice ser peronista yo puedo garantizarle que, cuando se ve el gabinete o los funcionarios, son muy pocos pero muy poquitos que pueden llamarse peronistas”, aseveró.
No obstante, el líder gremial agregó: “Sí puedo decir con total certeza que si se mantuvo hasta hoy este gobierno, lo mantienen las estructuras del peronismo: los gobernadores, los intendentes, los parlamentarios, que son en su inmensa mayoría peronistas”.
En tanto el secretario gremial de la CGT de Antonio Caló y jefe del Sindicato de Peones de Taxis, Jorge Omar Viviani, admitió que la central obrera que conduce el metalúrgico no será “fiscal” de la huelga nacional convocada para mañana.
Además, llamó “compañero” a su ex aliado Moyano. Se mostró esperanzado en que pueda darse “la unidad del movimiento obrero más cerca que lejos” y hasta consideró “no imposible” compartir un asado con los dirigentes de las otras CGT, aunque ratificó que la central obrera que integra no adherirá al paro y llamó a “calmar un poco los ánimos” a quienes lo convocaron.
Viviani sostuvo que, “a pesar de que todavía hay algunas cosas de la agenda del movimiento obrero que no están resueltas”, la CGT de Caló considera que, “a través del diálogo, se pueden ir resolviendo algunas (de esas) cuestiones”.
Viviani se definió como “un predicador permanente de la unidad del movimiento obrero” y añadió: “Ojalá que, en algún momento, más cerca que lejos, podamos juntarnos todos los compañeros, unificar el criterio y unificar la CGT como fue históricamente”.

Fuente El Litoral