El influyente músico colombiano Carlos Vives, quien lanzó su nuevo disco «Corazón Profundo», consideró que con el rescate que artistas de otros estilos han realizado del rico folclore colombiano, ese pueblo se ha vuelto a encontrar con su «verdadera identidad».
Este cantante y actor nacido en la localidad caribeña de Santa Marta, en 1991 trabajó en una telenovela, «Escalona», donde encarnó a uno de los grandes del vallenato Rafael Escalona.
Y a partir de allí grabó dos discos sobre canciones de Escalona, incluyendo clásicos del vallenato, de la cumbia, del porro y de otros ritmos colombianos.
«Esa novela hizo que regresara a mi tierra un año a trabajar en las provincias y a Mompos, la tierra de Totó la Momposina, donde nació la cumbia. La despreciaba, pero la cumbia es la música que salvaba las fiestas de los ricos», explicó en charla con Télam el cantante.
Inmediatamente, el hijo de Luis Aurelio, el médico de Santa Marta y de Fonseca, se imbuyó en ritmos que estaban casi proscriptos y a los que no se dejaba emerger por cuestiones raciales, ya que se la consideraban los ritmos de los pobres y de la gente del interior.
«Esos ritmos latían en cada provincia, pero no tenían espacio en la radio y la TV. Además muchos músicos tocaban las canciones de estos compositores en versiones pop y se enriquecían, sin darles dinero a los compositores», añadió.
Inmediatamente, Vives se pone a grabar «Los clásicos de la provincia» que con el hitazo «La gota fría» sirvió para que todo el mundo musical pusiera los ojos sobre la riquísima música de raíz colombiana.
El disco contenía clásicos de diferentes estilos y ritmos de compositores de todas las épocas, que como el mismo Vives se preocupa en aclarar: «Me encargué de que todos recibieran su dinero por los regalías de las canciones».
El disco incluía toques de rock, reggae y blues, ya que Vives tenía mucho vinculo con la escena rockera colombiana a través de un programa de radio que conducía.
«En mi programa escuchamos la invasión rockera argentina con Charly, Fito, Soda Stéreo, Miguel Mateos, Virus, pero también pasaba los demos de las bandas colombianas como Ekhymosis, el grupo de Juanes», detalló.
Por su trabajo, casi antropológico, Vives ganó el respeto de la vieja guardia integrada por figuras como Rafael Escalona, Totó La Momposina pero también la sangre joven como Juanes, Shakira, Fonseca y los Bomba Stéreo que lo cubren en elogios.
«Carlos rescató al folclore colombiano, lo puso en el centro de la escena, ante los ojos del mundo. Pero además es un hombre maravilloso», le dijo Juanes a Télam, hace un tiempo.
Sobre su labor para «Clásicos de Provincia», Vives explicó que «empezamos a tocar patrones cumbieros dentro del blues por ejemplo, mis colegas rockeros no conocían tanto de esta música entonces empecé a hacer música tradicional con patrones nuevos, lo experimentamos en «La gota fría», con guitarras tocadas de manera diferente».
«Fuimos encontrando coincidencias en el reggae, ya que por ejemplo la música vallenata siempre fue despreciada y no la tenían como música del Caribe, y teníamos mucho afán de decir que el vallenato también era música del Caribe», relató.
Sobre el origen de la cumbia, Vives es contundente al indicar que ese género «ha nacido en la Cordillera de Los Andes, es música andina, de indies bravos y bien salvajes. Recorriendo la Cordillera desde Colombia hasta Argentina pasando por Ecuador, Perú, Bolivia y el Norte argentino, uno puede encontrar cumbia al pie de las montañas».
Además aporta una teoría sobre la participación árabe en el folclore colombiano: «Hay patrones de percusión del vallenato que son árabes, marroquíes y se ha encontra influencia fenicia en Colombia, previa a la llegada de los españoles -sostuvo-. Allí la tiene a Shakira que es colombiana y mezcla el vallenato con ritmos de sus ancestros árabes».
Además, Vives ha rescatado a figuras populares colombianas como el ex campeón del mundo de la categoría welter junior Kid Pambelé, a quien menciona en varias de sus letras, y a su amigo el Pibe Carlos Valderrama, una figura de la selección colombiana de fútbol.
Vives además menciona como influencia sobre la música romántica colombiana del siglo XX al tango y en especial a Carlos Gardel.
«Mi abuelo era hombre del tango, escuchaba mucho a Gardel, y esa melancolía tanguera se colocó en el bambuco que es un ritmo bien romántico y triste», subrayó.
Con un gran poder didáctico, Vives explica el origen de la música sabanera, de la guabina, la puya, la rumba, la guasca, el son y el joropo y los instrumentos que los caracterizan.
Para Vives, el acordeón es esencial en los ritmos folclóricos colombianos, «porque era el piano de los pobres, teníamos dos fabricas en nuestro país, además de que muchos luthiers las fabricaban de manera casera».
Además de los grandes del folclore argentino, destaca el trabajo de artistas como Kevin Johansen y de Onda Vaga, «por lo rico de sus mixturas, lo sabroso. Son tan buenos sus discos».
Fuente Agencia Télam