El grupo de pop rock Los Tipitos editó su 12° disco, «Push», en el que vuelve a involucrarse en el camino de la canción rock, con un gen y ADN claramente argentino, y con un repaso más que interesante por diversas temáticas.
Para esta oportunidad, la banda decidió que el productor fuera Walter Pancioli, uno de los guitarristas y vocalistas, quien junto a los ingenieros Alvaro Villagra y Adrián Bilbao, le sacaron el jugo a un grupo que siempre entrega bonitas canciones.
«Push» deja en evidencia que lo que mejor le sienta a Tipitos es el medio tempo, aquella canción que no es un hit marchoso, ni pachanguero, sino que más bien tiene una profundidad melódica con entramados de cuerdas y pianos.
Aunque aquellas canciones con un tempo más rápido son un adorno del disco como «Apostar al amor», escrita por el baterista Pablo Tevez y el bajista Federico Bugallo, que incluye la participación de Ale Sergi en voz y en programaciones, dando un toque muy agradable a la canción.
Con la humildad que los caracteriza, Los Tipitos le entregaron toda la parte instrumental de «Resplandor» a los Pericos, para que estos armaran un reggae pop, rico y suave, mientras Pancioli, Bugallo, Tevez y el otro guitarrista y vocalista Raúl Ruffino se hicieron cargo de las voces y coros.
Tipitos al igual que otros exponentes de la canción pop argentina como Estelares y Ella es Tan Cargosa, siempre han dejado impresa la influencia del tango en su obra y en este caso no fue la excepción con la arrabalera «Me pateaste el bastón», compuesta por Bugallo que tiene la participación de Walter Ríos en bandoneón y de Pablo Motta en contrabajo.
«Viaje interminable», «Algo nuevo», «Mil años», «Amor de enero», «Funeral» y «Saludo al sol», son de lo mejor del disco y van camino a instalarse permanentemente en el repertorio de Tipitos como «Sábados blancos» y «Campanas en la noche».
En una charla con Télam, Pancioli brindo detalles sobre cada canción de «Push»:
-¿Por qué el nombre «Push» y esa tapa del disco que rememora al viejo logo de Fiat?
-La tapa y el arte lo hizo Alejandro Ros, dimos muchas vueltas con el nombre porque nada nos gustaba y apareció justo. En la Fórmula Uno, cuando los pilotos están en la conferencia de prensa están todo el tiempo `dale, dale, dale; push, push, push` y de algún modo eso simboliza lo que somos, el dale.
-¿Por qué decidiste producir vos el disco?
-Tiene que ver con recuperar elementos de nuestros comienzos también y a la vez con que les dije a los chicos que me sentía capacitado de producir el próximo disco nuestro y me dieron la mano para hacerlo.
No quería que buscáramos tantos cortes, quería buscar lo que representara cien por ciento al artista. Con todos los que laburamos estoy agradecido pero me quedé con ganas de grabar otros temas y tratar de elegir los temas que más me llegan a mí, más allá de que los cortes, los hits, también nos llegan pero elegir, una cosa no quita a la otra, los temas que no van a ser hits también es muy grato hacerlo, hay que darse los gustos.
-¿Con tantos compositores es fácil o difícil elegir los temas que quedaran en el disco?
-Para nosotros es muy bueno que todos compongamos, porque siempre hay muchos temas para elegir y quedan muchos temas afuera del disco. Nos pasa de decir `que bueno` el tema tal y después vemos que los nuevos son mejores.
Lo que pasa con el hit es que por ahí pega y se va. El clásico perdura en la memoria de la gente, que le dio un destino y una historia a cada canción.
-¿Cómo decidieron que la parte instrumental de «Resplandor» la hicieran los Pericos?
A -Los Pericos los llamamos porque una madrugada me desperté y empecé a tocar reggae y le puse letra y cuando empezamos a tocarlo en la sala de ensayo vimos que éramos incapaces de hacerlo y ahí se nos ocurrió decirle a Los Pericos si se copaban con grabarlo, hicieron un laburo increíble.
-¿Y la colaboración con Ale Sergi, cómo se dio?
-Y con Ale Sergi, fue una idea de Pablo, con el tema «Apostar al amor» que a mí me iba por el lado más Ramones y de repente vimos que el estribillo era re Miranda y se re copó, le dijimos que tenía libertad total y nos devolvió una cosa tremenda con la que estamos muy agradecidos. Ale grabó teclados, voces, máquinas, ese tema lo produjo todo Ale.
-¿Sentís que le medio tempo es lo que mejor le sienta a la banda? ¿Qué ese tiempo de canciones son las que más perduran en la cabeza de la gente?
-Sí, sin lugar a dudas. Nos lo dicen todos nuestros amigos y lo vemos en cada show en cada punto del país. «Campanas en la noche» o «Luz negra» son temas que la gente los hace más propios que otros como «Brujería» por ejemplo que si bien están bien, pero no tienen tanta profundidad.
-¿Van a cumplir 20 años de carrera, hubo muchos altibajos?
-Cuando volvimos de Mar del Plata y teníamos que hacer el primer disco con León Gieco fue un momento de zozobra y no entender bien la situación. Y después, tocar en la calle fue un hallazgo tremendo, fue un éxito. Habíamos hecho un disco independiente con una plata que me había sobrado. Vendimos 2.000 discos solo tocando en la calle y sin compañía.
En todo este tiempo de carrera, te vas dando cuenta de muchas cosas, por ejemplo que aquellos que dicen que el rock argentino está muerto, se equivocan muy feo.
Lo ves en el under, hay propuestas riquísimas, con cosas rarísimas. Y nosotros no somos de apegarnos a las bandas consagradas, somos de escuchar mucho indie porque trabajamos de productores. Salvo con Estelares y con Ella es tan Cargosa, con las que hay mucha empatía y sintonía, somos de escuchar más a las bandas under.
Fuente Agencia Télam