Se extenderá hasta Agosto. Podría incluir cortes populares de carne. El congelamiento de precios, diseñado por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, con los súper e hipermercados continuará después de junio, pero se reducirá a 500 productos (hoy son más de 10.000). Serán artículos de primera necesidad vinculados a la canasta básica, mientras que el resto se liberará “controladamente”.
Según coinciden en sostener los analistas, a cambio de tal decisión no se abrirá la importación y el secretario de Comercio Interior se compromete a influir en las paritarias de este año.
Moreno prometió, además, presionar al Sindicato de Empleados de Comercio, que conduce Armando Cavalieri, para que divida su reclamo salarial en dos cuotas, la mayor en los sueldos de octubre. La idea -se sostiene- es que el congelamiento se renegocie después de las elecciones legislativas del 27 de ese mes. Sobre lo que no hay por ahora fecha cierta es acerca del momento en que comenzará a operar la Supercard.
El director ejecutivo de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas, Miguel Angel Calvete, confirmó que a partir del 1° de junio regirá un nuevo acuerdo de precios y que además se permitirá la publicidad del listado en los medios de comunicación, algo que había desaparecido en los últimos meses.
“Van a estar incluidos todos los productos de primera necesidad y de máxima rotación. Y también se está hablando con la industria cárnica para incluir cortes populares. Queremos que sea sustentable”, sostuvo esta mañana Calvete en declaraciones radiales.
Actualmente, son más de 10 mil los artículos que mantienen sus mismos valores desde que comenzó la medida. El nuevo convenio podría incluir cortes populares de carne, según confirmó el empresario.
Moreno terminó de discutir ayer con los representantes de los hipermercados Jumbo-Disco, Carrefour, Walmart, Coto y otras cadenas del interior la vigencia del acuerdo, que en los últimos días había comenzado a ceder.
Con respecto al segundo cambio introducido para esta nueva etapa del acuerdo de precios, se aclaró que ya no habría “congelamiento” de los valores sino pisos y techos.
La baja en las ventas minoristas, las presiones alcistas de los fabricantes de alimentos, bebidas, productos de consumo masivo (que nunca llegaron a acordar con Moreno una política de precios seria que sostenga el congelamiento) y los aumentos generales de costos (especialmente ante la inminencia del cierre de las paritarias 2013) hicieron que la vigencia del acuerdo de precios se encamine a un callejón difícil de superar para todas las partes involucradas. En los últimos días además se veían serios faltantes de productos básicos, además de diferentes estrategias de los fabricantes para salvar la situación (menor cantidad de mercadería en los envases, caída de la calidad y falta de distribución masiva de los productos más importantes).

Fuente El Litoral