En un estadio colmado por jóvenes, treintañeros y fanáticos nostálgicos, la banda repasó clásicos y nuevos temas durante más de dos horas de show, contagiando al público de la mística ochentosa que la caracterizó e hizo brillar desde su origen.
A tres años de su última presentación en la Argentina y cumpliendo 30 de trayectoria, el grupo de New Jersey presentó en el estadio Vélez Sarsfield “Bon Jovi. Because we can”, un espectáculo en el que sus seguidores argentinos, dando el presente en una fría noche primaveral, corearon los más de 20 temas del grupo, que en toda su historia lanzó 17 discos y vendió 130 millones de ejemplares.
En el marco del único concierto porteño de una gira que comenzó a principios de año y lo llevó por Africa, Europa, Estados Unidos, y Latinoamérica, la banda se impuso a los obstáculos imprevistos por la baja de dos de sus integrantes fundadores.
Es que apenas comenzada la gira, Richie Sambora -legendario guitarrista del cuarteto- debió dejar el tour por “problemas personales” y en su reemplazo está tocando Phillip Xenidis, mientras que Tico Torres abandonó la batería por apendicitis y luego por un problema de vesícula, razón por la que fue suspendida la fecha inicial del show que iba a realizarse en el Estadio Unico de La Plata para mudarse ahora al barrio de Liniers.
En la previa, los canadienses Nickelback subieron al escenario ofreciendo una sólida actuación celebrada por muchos de los presentes, y sin manifestar condición de teloneros, calentaron el clima hasta cerrar, con el público cantando su hit, “How you remind me”.
Pero el estadio estalló cuando apenas pasadas las 21 Bon Jovi irrumpió en el escenario y en las tres pantallas gigantes que lo rodeaban, con el tema “That´s what the water made me,” del disco “What About Now”, editado en el reciente marzo.
De campera de cuero y jeans azules, Jon Bon Jovi, más líder que nunca hizo honor a ese rol y llevó al público a un paseo por su dorada década de los ochenta con hits como “You give a love bad name”, “Runaway” o “Bad Madicine”, sin olvidar los clásicos que logró imponer en los noventa. Ahí fue el turno de “Keep the faith”, “In these arms”, “Sleep when I dead”, “Wanted.
Dead or Alive”, o “It´s my life”, que despertaron gritos y coros, en especial del público femenino.
Con más de 50 años, Jon Bon Jovi demostró saber bailar al ritmo del paso del tiempo: durante las más de dos horas de show, mantuvo intacto su espíritu rockero, su carisma, y seducción.
Ejemplo de eso fue haber frenado el concierto a los 15 minutos de comenzar -y cuando Vélez explotaba en uno de los hits- porque una fanática se había descompensado. «Retrocedan, así no podemos», propuso a los seguidores más cercanos a la valla, mientras que a la joven le refirió «Yo te tengo, todo va a estar bien».
Superado el percance, el show escaló en éxitos y nuevos temas, manteniendo arriba a miles de personas que en su mayoría rondaban las tres y las cuatro décadas.
Pese a las dos grandes ausencias -anoche solo el tecladista David Bryan compartió con Jon esa calidad de integrante fundador- los Bon Jovi sonaron y sedujeron al público también con temas más recientes como el romántico “Make a memory”, del disco “Lost Highway” (lanzado en 2007) y los nuevos “Whay about now” y el que le dio nombre al tour “Because you can”.
Pero fue en “Who says you can´t go home” en el que el actor y líder de la banda invitó al escenario a tres chicas, que bailaron, cantaron y hasta se arriesgaron a pedirle un beso.
En otro momento del concierto, Jon realizó un inesperado homenaje a los Rolling Stones al cantar «Start me up» e imitar la coreografía de Mick Jagger.
El conjunto norteamericano que lleva décadas de éxitos, separaciones, y un camino recorrido por distintos géneros musicales, desde el rock, pasando por el country y el pop, extrañó a Sambora pero no opacó la contundencia y firmeza del show.
Quedaron afuera de la presentación, históricas y esperadas baladas como “Always”, “Bed of Roses”, o “»Never say good bye» y Bon Jovi solo deleitó con el mítico “I´ll be there for you” para cerrar el recital con un estadio iluminado por celulares.
El grupo continuará con el tour hasta fin de año y ahora se prepara para presentarse el 29 de septiembre en México y luego en Canadá, Estados Unidos, Japón y Australia.
Fuente Agencia Télam