El procesamiento de Amado Boudou provocó la reacción casi al unísono de los dirigentes de la oposición que prácticamente por unanimidad reclamaron la renuncia del vicepresidente de la Nación.
Dirigentes de diferentes bancadas celebraron la determinación judicial y coincidieron en solicitar el apartamiento del funcionario de su cargo. Algunos le reclaman a Cristina Fernández que le exija la renuncia; otros piden que el funcionario tome licencia, y adelantan que impulsarán el pedido de juicio político.
La diputada nacional por el GEN Margarita Stolbizer, advirtió que Boudou “inmediatamente” debería regresar de su viaje oficial a Cuba, y le solicitó a la presidente Cristina Fernández que le pida la renuncia. “Sería un papelón que este hombre nos estuviera representando en un acto oficial el lunes”, planteó la legisladora. “El conjunto del gobierno tiene que sacarse de encima a este hombre que le hace mucho daño al gobierno y al país. Los argumentos de la causa son absolutamente contundentes”, resaltó.
También el titular del radicalismo, Ernesto Sanz, pidió que Boudou “dé un paso al costado”, y consideró que Cristina Fernández es “responsable política” de esta nueva situación. “Tiene que dar un paso al costado, sin duda. Pedir licencia hasta que la Justicia resuelva definitivamente”, afirmó. Finalmente, destacó que “es la primera vez en la historia de la República Argentina que se procesa a un vicepresidente y uno de los pocos casos de un funcionario en ejercicio”.
Juicio político
El diputado nacional Julio Cobos, en tanto, pidió el “distanciamiento” de Boudou del gobierno nacional y advirtió que si esa decisión no la toma la Casa Rosada, acompañará un pedido de juicio político que se hará desde el radicalismo en el Congreso. “La presidente no puede negar su responsabilidad política -advirtió-. Ella fue quien lo eligió, pero ahora tiene que pensar en tener por primera vez en la historia un vicepresidente procesado por la Justicia argentina”. Cobos consideró que “hay demasiados hechos y acciones que tuvimos a lo largo de este proceso que llevó incluso a la estatización de la empresa Ciccone”, y consideró que esa maniobra tuvo como objetivo “tapar las huellas” de las irregularidades para su compra.
Desde el massismo, el diputado nacional Darío Giustozzi adelantó que también insistirán con el juicio político que ya había pedido contra el vicepresidente Amado Boudou. “Uno no puede salir del estupor de ver a un vicepresidente procesado”, dijo, y admitió que nunca imaginó que el caso Ciccone “podía desembocar en una situación como ésta que es una vergüenza, en la que termina manchada la política argentina”. Asimismo, cuestionó al gobierno por la “hipocresía para tratar este tema, evadir a la Justicia y haber sacado al procurador general Esteban Righi, ante los primeros avances de la Justicia en el caso”.
Giustozzi resaltó la responsabilidad política de la presidente Fernández por haber nombrado a su vice, situación que describió como un “error histórico grave y va a ser un párrafo de la historia política muy importante”.
Más críticas
Desde el PRO, la senadora nacional Gabriela Michetti recordó que “desde hace dos años” su partido está pidiendo el juicio político para Boudou, y confió en que con el procesamiento se sumen el resto de los partidos políticos. “Hace muy poquito, un mes, el PRO presentó un proyecto para el juicio político. Quienes no han aceptado son los diputados de otros partidos, pero creo que ahora es muy probable que el resto de las fuerzas opositoras quieran pedir este proceso”, consideró.
Consultada sobre si el vicepresidente debe renunciar o pedir licencia, evitó tomar una postura al indicar que como senadora le toca “una responsabilidad muy especial”, porque sería la parte juzgadora en un potencial juicio político. “Yo he sido muy cauta en que eso lo tiene que decidir el propio vicepresidente, porque si emito un juicio en ese punto, me van a decir que estoy prejuzgando”, sentenció.
Fuente El Litoral