La presidenta Cristina Fernández de Kirchner afirmó ayer que la Argentina «no va a entrar en default por una razón esencial: porque en default entran los que no pagan y Argentina pagó».Habló en la planta de Yamaha, en General Rodríguez.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner se refirió a la situación que está transitando la Argentina por el reclamo de los fondos buitre en la Justicia de los Estados Unidos. «No me van a hacer firmar cualquier cosa amenazándome con que el mundo se viene abajo», advirtió la Presidenta.
Ante el ataque de los fondos buitres recordó a los argentinos que «la Argentina no va a entrar en default por una razón esencial: porque en default entran los que no pagan y Argentina pagó».
«Van a tener que inventar un nombre nuevo, no sé cuál será», dijo en referencia a que la Argentina ha girado los fondos para pagar a los acreedores. «Las calificadoras, los bancos de inversión, siempre encuentran algún término con el que disfrazar lo que pasa: que un deudor pagó y alguien bloqueó y no deja llegar ese dinero a los terceros que son los tenedores del canje», indicó en relación a la situación generada a partir del fallo del juez Thomas Griesa.
La jefa de Estado desmitió que el país se niegue a negociar. «Dicen que la Argentina nunca negoció» pero recordó que en 2005 y en 2010 se hicieron numerosas presentaciones alrededor del mundo para seducir a los tenedores de bonos en default a ingresar a los planes de reestructuración de deuda. En ese sentido amplió con los ejemplos de la negociación alcanzada con Repsol y con el Club de Paris. «Es todo lo que arreglamos y pagamos» pese a que la deuda fue generada por otros gobiernos dijo y agregó que «no nos quejamos porque nos hacemos responsables. Somos gobernantes que ponemos la cara», señaló pero advirtió que «ésta Presidenta no va a firmar nada que compometa el futuro de las generaciones argentinas».
Y reforzó la idea con que no va a firmar «cualquier cosa» bajo la amenaza «de que el mundo se viene abajo».
Respecto de la cláusula RUFO, la primera mandataria explicó que se pidió en las conversaciones llevadas a cabo en los Estados Unidos que se dé una especie de «seguro y nosotros quedamos cubiertos» pero advirtió que ante este pedido no hubo «ni una sola respuesta» sino «absolutamente silencio».
«No nos podemos dejar arrebatar el presente y mucho menos el futuro. Vamos a seguir hablando, vamos a ir a dónde nos indiquen pero con nuestras razones», señaló.
También advirtió las verdaderas razones de por qué quieren que la Argentina entre el default. «Lo que quieren hacer es caer la restructuración para quedarse con los recursos naturales».
«Está tan claro que, muchas veces cuando escuchamos algunas palabras no son cantos de sirena, son graznidos de caranchos y de buitres», dijo en el acto realizado en General Rodríguez.
Y recordó que la Argentina está dispuesta a honrar las deudas con el ciento por ciento de los tenedores «pero de formar equitativa, justa y sustentable».
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner realizó estas declaraciones hoy a la tarde en la inauguración de una planta de motos de la firma Yamaha en la localidad de General Rodríguez. » Hace un año estábamos reunidos con ejecutivos de Yamaha que nos anunciaban la instalación de esta planta y hoy, a un año, estamos los argentinos inaugurando una fábrica de motos», dijo.
Durante el discurso la jefa de Estado realizó una defensa del modelo aplicado desde el 2003 a la fecha. «Hay que vender y consumir porque de esto se trata el modelo que instalamos en la Argentina» y que se basa «en el consumo interno de cosas hechas por trabajadores argentinos» y agregó que «eso significa valor agregado».
Abogó, a su vez, por el rescate de la industria nacional y la incorporación cada vez de mayor componente nacional a los productos terminados en la Argentina.
Recordó que el modelo económico está basado en «el consumo interno, la inversión pública, la inversión privada y el consumo externo» y dijo haciendo referencia al último punto que «las exportaciones han caído en todo el mundo en volumen y en precio por lo cual es imprescindible fortalecer el mercado interno».
En ese sentido también admitió que en algunos sectores ha habido caída en ventas. «No quiere decir que no tengamos dificultades, hemos tenido una cíada del 20% en materia de producción, en sectores como venta de motos» dijo pero recordó que se trata de un momento «especial del mundo y en particular de la Argentina», y señaló qie «lo que más impacta son muchas veces las expectativas malas que se generan a través de rumores, de profesías de gurúes que dicen que nos va a ir peor y finalmente terminamos teniendo problemas. La gente entonces retrae el conumo si se le genera mala onda», aunque destacó que el consumo en supermercados creció.
En cuanto a la generación de expectativas negativas, la Presidenta ejemplificó con lo que sucedió con la soja y ante la especulación de un dólar mucho más alto, «se recomendaba que no se vendiera soja. Podíamos ver parte de la cosecha que no se vendía cuando la tonelada estaba a un valor de 558 dólares, hoy bajó a 474 dólares la tonelada».
La Presidenta recordó «hace unos días estuvimos reunidos con los BRICS» en donde se adviritó lo que está sucediendo en la economía mundial «¿qué es lo que debemos hacer los argentinos frente a esto que se plantea como una caída del PBI global?: incentivar el consumo interno. Esto fue lo que nos salvó en las épocas de peores crisis y nos permitió salir adelante en 2010 y 2011», dijo.
Cristina Fernández de Kirchner distinguió también los acuerdos selllados con el presidente de China Xi Jinping para lograr el financiamiento para las represas Néstor Kirchner-Jorge Cepernic; los fondos para recuperar el ferrocarril Belgrano Cargas y principalmente el swap entre el Banco Central de la República Argentina y el Ministerio de Comercio de China. «Es un acuerdo entre autoridades monetarias para que en momentos de estrés monetario, de especulación y ataque exista un aporte de 11.000 millones de dólares para nuestras reservas del banco central y contrarrestar ataques especulativos».
«Hay un mundo nuevo, actores nuevos que quieren cooperar con uno para arrastrar este inmenso carro que es el mundo que está siendo sostenido por los países emergentes en una crisis generada por las economía centrales y en la que nos quieren tirar el muerto a las economías emergentes», dijo.
En ese sentido destacó que los BRICS significa un nuevo ordenamiento mundial y la Argentina «estará allí presente y me siento muy orgullosa de haber sido la Presidenta que firmó un acuerdo con la primera economía del mundo para entre todos superar este momento global».
Por último, solicitó a los sindicatos colaborar en la mejora de la competitividad, «que haya menos ausentismo porque es un mundo competitivo. Hay que cuidar lo que han conseguido. Cuidemos las cosas que logramos conseguir. Tratemos de corregir los errores, cada uno en su lugar por pequeño que parezca su función la lleve adelante pensando en el otro. Como lo hizo la selección nacional», conlcuyó.
