Alicia, más conocida como «La Uruguaya«, una comerciante cuyo comercio se ubica en la esquina de calle San Martín y Pueyrredón fue asaltada por un sujeto de unos 18 años, vecino del Barrio Norte.
El asalto fue a mano armada, con un arma de fuego a las 16 de esa jornada del primer día del año.
De acuerdo a lo que se conoce el delincuente entró al negocio y esperó que se atendiera a todos los clientes y cuando la mujer estuvo sola detrás del mostrador le pidió cigarrillos, los que están ubicados sobre la cabeza de la mujer.
Cuando ella bajó los ojos, tenía un arma de fuego en su frente y la palabra del malviviente que le decía que le diera todo el dinero.
La mujer no se inmovilizó y atendió en todo al maleante.
Insólitamente, llegó al local comercial otro sujeto de la misma edad del asaltante, que precisamente salía de la Comisaría Primera donde había permanecido por haber sido detenido por otro hecho policial.
Sin que nadie se diera cuenta tomó el arma de fuego de su amigo asaltante y lo amartilló. La mujer sólo atinó a bajar la cabeza. «No, no, te voy a matar» le dijo y se fueron los dos tomando alcohol.
La comerciante dio aviso a la policía que se ubica a menos de 20 metros y el Comando Radioeléctrico detuvo al implicado, el cual permaneció detenido por unas horas.
Cuando salió, no tuvo mejor idea que ir a amanezar a la comerciante porque lo había denunciado.
De acuerdo a dichos de la policía el arma de fuego no sería sino una imitación, de estos juguetes tan reales que suelen hacerse y venderse.
No hay información oficial sobre los hechos, recogidos por cronistas de este medio como en el caso del abuso.
Fuente El Colono del Oeste