El Jefe de Gabinete, Aníbal Fernández y el ministro de Economía, Axel Kicillof advirtieron que el impuesto a las Ganancias, en la cuarta categoría, afecta a un entre 10, a lo sumo 15% de los trabajadores de los gremios del transporte, por lo cual las razones son «políticas».
En una conferencia de prensa conjunta, que ofrecieron este mediodía en la Casa de Gobierno, el Jefe de Gabinete afirmó que se garantizarán mañana “servicios mínimos” y seguridad “para que la gente se pueda mover”, que estará a cargo de Sergio Berni.
Ambos dieron cuenta de la reunión que mantuvieron previamente con representantes de las cámaras empresarias de transporte, considerando que el Estado es un socio ya que reciben el 70% en subsidios para su actividad. Aníbal Fernández explicó que el Estado invierte buena parte en subsidios “para beneficiar al transportado”
El Jefe de Gabinete insistió en que la mayor parte del esfuerzo lo hace el Estado y los empresarios deben garantizar “la retribución de los subsidios para que puedan tener buena prestación de servicio” y además deben tener diálogo –dijo- con sus sindicatos para resolver los conflictos. “No es el Estado el que tiene que resolverlos en forma directa”, aclaró.
Aníbal Fernández enfatizó “alguien tiene que salir a contar los números de la actividad” y puso de relieve que es ínfimo el número de trabajadores del sector alcanzado por dicho impuesto.
También salió al cruce de cabes de agencias de noticias que decían que en la reunión con el empresariado no se le iba a dar ni gasoil. “No somos canallas para prepara una cosa de esta característica.
Hablando seriamente el papel que no quiere hacer el Estado es el de paganini”, admitió que el servicio de transportes “necesita ser sostenido, atendido por parte del Estado” “y no está encontrando respuesta ordenada, una discusión de calidad entre empresarios y sindicatos”.
La responsabilidad, agregó, de reconocer que en los gremios del sector “los que están pagando Ganancias es mínimo”.
Tampoco se planteó durante el encuentro de una suba de subsidios; “bueno sería”, dijo Aníbal Fernández y pidió “una actitud responsable por parte de los empresarios respecto de la actividad. Creemos que tienen que hablar con los gremios, poner las cosas en su lugar” e insistió en “la enorme cantidad de dinero que pone el Estado, para los transportados, en buenas condiciones” y planteó que el Estado “pone la plata y el paro se lo hacen al Estado”.
Puso de relieve que el impuesto alcanza a un universo “muy chico”, y pagan “cifras muy chicas; lo agarra la cola al final de este impuesto que, además, se paga en todos los lugares del mundo”.
En tanto el ministro de Economía afirmó que hubo intercambio de información con el sector empresario y agregó que los que van al paro son trabajadores de empresas del sector privado, en su mayoría de los servicios de ómnibus de corta, media y larga distancia.
Destacó que el Impuesto a las Ganancias afecta a entre el 6 u 8 por ciento de los trabajadores argentinos y “alcanza a los del decil superior que son los que más ganan”.
Kicillof dijo también que solo el 10% de los trabajadores son alcanzados, en tanto que en otros países del mundo alcanza al 30% o más en tanto que en el gremio de la UTA abarca entre el 10 y el 15%. “van al paro con un reclamo que afecta a una porción tan chiquita; es solidaridad no con los menos ganan, sino a los que más ganan”.
Se preguntó “si perjudica a pocos el pago del impuesto ¿por donde pasa la discusión?: la verdad es que motivos del paro son otros”.
