Hay historias extraordinarias. Lo será en la vida de Berenice cuando pueda crecer y ser mayor. Y podrá leer esta crónica de cuando policías y médicos de Humboldt le salvaron la vida cuando la fatalidad ya decía su nombre.

Fue a las 13 del domingo de Pascua. Las calles de Humboldt, localidad convecina a Esperanza, eran un desierto. Los más jóvenes dormían después de la noche de boliche y fiesta. Los mayores compartían la mesa en familia, a posterior de la misa pascual del domingo.

Y en el Día del Resucitado un hombre de 46 años junto a su mujer de 41 años, corrían desesperados por la calle con fuertes gritos de socorro y una enorme desesperación. Su bebé se les moría.

Bajo las órdenes de la Jefatura de la Unidad Regional XI, como en cada uno de los 35 pueblos y las dos ciudades, el móvil policial recorría las calles, en estado de alerta. Los delincuentes no tienen Pascua y suelen rezarle a San la Muerte.

Fue así que el comisario Fabián Cruz -esperancino- y el suboficial Luna acudieron rápidamente al ruego de auxilio.

Observaron inmediatamente la bebé de 7 meses que estaba desvanecida, ya no respiraba y no tenía signos vitales.

Entre lágrimas la madre les rogó que la ayudaran. Inmediatamente los policías se dirigieron al hospital de Humboldt, colocando las balizas e hicieron sonar la sirena para avisarle a los posibles conductores que había una emergencia extrema, mientras e comunicaban con el hospital.

El rezo de los padres era que hubiera un médico un Domingo de Pascua. No había uno, esperaban dos. La pediatra residente de apellido Müller y el doctor Oscar Arnoldt, tenían todo preparado para cuando llegó Berenice.

Se vivieron momentos de tremenda angustia. Pero los médicos le salvaron la vida. Y una vez restablecida su situación, Berenice fue trasladada al Hospital de Niños de Santa Fe.

Para Berenice, para sus padres, los médicos, los policías este Domingo de Pascua será recordado siempre como el día del milagro, una bendición de Jesús Resucitado.

La información recogida en las últimas horas da cuenta que Berenice está bien de salud.

Fuente El Colono del Oeste