El Presidente Mauricio Macri remarcó que Argentina dejó atrás «el aislacionismo que obstaculizaba» la integración con el mundo.
En su primera intervención ante los líderes mundiales en la cumbre que se desarrolló en la ciudad china de Hangzhou, convocada para tratar el tema «Hacia una economía mundial más eficaz y eficiente y gobernanza financiera», Macri sostuvo que Argentina dejó atrás «años de populismo» y aseguró que su administración encaró «cambios revolucionarios».
«Queremos generar confianza y ya hemos empezado por 30 de las 48 reformas recomendadas por el G20. Hemos lanzado también una fuerte lucha contra la corrupción y un programa de energías renovables», enumeró Macri y señaló a «la lucha contra la amenaza del cambio climático» como otro de los temas que la Argentina considera prioritarios en la agenda global.
El mandatario aseveró, además, que el país necesita impulsar «muchas obras de infraestructura», pero advirtió que, para ello, es indispensable que pueda acceder a «financiamiento a largo plazo».
En tanto, en la tercera sesión plenaria del foro, Macri se expidió en favor de un sistema comercial «abierto, inclusivo y fuerte» para potenciar «el impacto positivo de las inversiones» y generar «prosperidad» en la economía.
“Es imprescindible que desarrollemos marcos legales transparentes y predecibles, que le den seguridad al inversor y que, a la vez, resguarden el derecho de los países receptores de inversión extranjera directa a regular en materia de políticas públicas», señaló.
En su mensaje en este capítulo del encuentro, convocado para tratar el tema «Comercio e Inversión internacionales sólidos», el Presidente señaló que «los países del G20 debemos mostrar liderazgo y determinación para lograr un comercio abierto, sostenible e inclusivo, basado en reglas claras».
Dijo, además, que la Argentina «está preocupada por el débil crecimiento del comercio mundial».
«Consideramos que nuestros países deben centrar sus esfuerzos en fortalecer el sistema multilateral de comercio y contribuir a que la Organización Mundial del Comercio siga cumpliendo un rol protagónico», agregó.
Aseveró luego, respecto de los temas pendientes de la Ronda Doha, que «tenemos que seguir negociando en búsqueda de resultados concretos».
«Sólo así vamos a poder combatir el proteccionismo en todas sus formas, incluido el proteccionismo agrícola, uno de los más arraigados en el sistema multilateral comercial», indicó.
Por otro lado, sostuvo que, «si bien reconocemos y damos la bienvenida a los avances de la décima Conferencia Ministerial de la Organización Mundial de Comercio en cuanto a la eliminación de los subsidios a las exportaciones agrícolas, necesitamos continuar trabajando hacia una reforma más profunda y ambiciosa».
«La eliminación de los subsidios distorsivos y el acceso transparente a los mercados nos permitirá a los países en desarrollo financiar las necesidades de crecimiento y avanzar en la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030», subrayó.
Por otra parte, remarcó que en la Argentina «más del noventa por ciento de las compañías son pymes», que generan «el 70 por ciento del empleo privado formal, convirtiéndolas en una pieza fundamental del aparato productivo».
«Por eso, creemos que es fundamental adoptar medidas complementarias para evitar que los países en desarrollo queden confinados a ser proveedores de materias primas y puedan escalar hacia actividades de mayor valor agregado», apuntó.
En otro capítulo de las sesiones plenarias de cumbre del G20, Macri subrayó ante los líderes mundiales que “en la Argentina ya dejamos atrás el aislacionismo que obstaculizaba nuestra integración con el mundo».
En tanto, al exponer en la cuarta sesión plenaria de la reunión, dedicada al tema «Desarrollo inclusivo e interconectado», el jefe de Estado destacó especialmente el papel protagónico que aspira a cumplir la Argentina en la agroindustria.
«El mundo enfrenta desafíos de magnitud para poder alimentar a una población de más de 9.000 millones de personas en 2050. Y aquí la Argentina tiene mucho para aportar,
porque producimos alimentos de calidad para más de 400 millones de personas, casi 10 veces nuestra población. Y queremos duplicar la producción en los próximos años», remarcó.
En este marco, señaló que «el comercio internacional es una condición fundamental para el impulso de la agricultura», pero advirtió que, «si queremos erradicar el hambre y la pobreza, debemos eliminar las distorsiones».
«Los avances de la última Conferencia Ministerial de la OMC para eliminar los subsidios a las exportaciones agrícolas son una clara señal de la necesidad de una reforma ambiciosa», insistió.
Macri sostuvo también que, «en el camino hacia el desarrollo, no existen las soluciones mágicas ni los atajos» y afirmó que «cada uno tiene que aportar desde su lugar, pensando globalmente y actuando localmente».
«Por eso, la Argentina busca integrar los objetivos globales con el plan nacional de Gobierno, a través de una mirada transversal», señaló.
Destacó, asimismo, que «estamos poniendo en marcha el plan de infraestructura más ambicioso de nuestra historia» y remarcó que «las obras de infraestructura son clave para mejorar la competitividad».
«Por eso nuestra meta es dar un salto de innovación y fomentar las alianzas público-privadas para resolver las brechas de conectividad física y modernizar nuestro sistema de rutas, autopistas, ferrocarriles y aeropuertos», apuntó.
«Con estas metas, estamos avanzando hacia un modelo que piense en el futuro de la gente. Un futuro de desarrollo inclusivo e interconectado y esperamos poder seguir trabajando juntos con los miembros del G20 en esta importante agenda», concluyó.
Fuente Agencia Télam