Hay mil maneras de responder al enunciado del título, no olvidemos a nuestros Héroes , no olvidemos que dieron la vida por nosotros, no olvidemos que no tenían opción (en su mayoría eran todos muy jóvenes, eran pibes), no olvidemos que sus familias aún los lloran, no olvidemos.
Cómo mínimo se merecen un homenaje, un reconocimiento, un aplauso, un abrazo, un humilde acto para sentir el calor y agradecimiento de la gente, será tal difícil hacerlo?
En «Nuestro Tiempo» dialogamos con Gustavo Lauxmann y Adolfo «Fito» Schweighofer, quienes nos contaron una historia sin desperdicios… tomate un tiempo y escuchala…