Vecinos de la región optan por éste y otros distritos alejados de las grandes ciudades en búsqueda de mayor tranquilidad. Esta localidad es una de las que seduce a muchos santafesinos, principalmente por su estratégica ubicación cercana a la autovía 19, la que posibilita estar en la capital provincial en unos pocos minutos.
La creciente demografía de las grandes urbes, la que habitualmente es acompañada por los periódicos hechos de inseguridad, la polución y el estresante trajín diario, motiva que cada vez más personas opten por los pueblos cercanos para radicarse y vivir. Una de las opciones más elegidas por su estratégica ubicación es Franck, situado a tan sólo 25 kilómetros de la ciudad de Santa Fe y a unos 14 de Esperanza, ciudad cabecera del departamento Las Colonias. Su rápida salida desde la ruta 6 a la Autovía 19, y las alternativas eficientes para llegar a la capital provincial (como por ejemplo la autopista Rosario Santa Fe y el acceso norte en Santo Tomé), hace que en tan solo 20 minutos se pueda llegar rápidamente a la segunda localidad más poblada de la bota.
La diferencia es clara y muy marcada: pasar los días en un distrito de poco más de 8 mil habitantes, indudablemente es muy distinto a vivir en uno que supera los 400 mil. Sobre este tema, El Litoral consultó al vicepresidente comunal de Franck, Damián Franzen, quien aseguró que cada vez son más las consultas y las personas que terminan construyendo sus destinos en territorio franckino. “La calidad de vida que tiene nuestro pueblo no se encuentra en las grandes ciudades, por eso en los últimos 4 o 5 años muchas familias de Santa Fe, Santo Tomé o Esperanza deciden cambiar todo y se vienen a instalar aquí”, afirmó el funcionario.
Servicios e industrias
Franzen deduce que esta migración ocurre por dos motivos principales. El primero, la existencia de todos los servicios en prácticamente el ciento por ciento del ejido urbano. “Tenemos casi el 80 por ciento de las cuadras pavimentadas, lo cual es fruto del esfuerzo de los vecinos a través del sistema de contribución de mejoras; estamos ampliando la red de cloacas a 8 nuevas manzanas, para extender esta prestación a todo el pueblo; el agua que brinda la Cooperativa local llega a cada casa; y con el refuerzo del gasoducto situado en la zona de San Jerónimo del Sauce, vamos a contar con el caudal suficiente para extender el servicio de gas natural a aproximadamente mil viviendas más”, precisó el vicepresidente comunal, asegurando que de esta forma se cubrirá la totalidad del poblado con este beneficio.
La segunda razón que motoriza el arribo de vecinos de otros lugares a esta zona, es el perfil industrial que siempre caracterizó a Franck. En la actualidad existen unas 8 industrias grandes en el lugar, principalmente lácteas y metalúrgicas, a las que se suman otras pymes vinculadas a este último rubro mencionado y a los productos agroquímicos, superando de esta forma las más de 20 empresas. Esto genera un importante movimiento de trabajadores, muchos de ellos provenientes de distintas localidades de la región. “Por esa razón, muchas familias ligadas a estas compañías optaron por venir al pueblo y ya hacen sus vidas acá, lo cual produce un sostenido crecimiento poblacional”, explicó Damián Franzen.
Fuente El Litoral