La actividad del mercado cayó un 6,5 por ciento en relación a junio. Antes de las elecciones había expectativas de repunte en agosto, afirmó el titular de la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales.
La actividad del mercado inmobiliario rural cayó en julio pasado en 6,5% en relación a junio, dentro de una tendencia que se mantiene luego del resultado de las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del 11 de agosto pasado, informó hoy la cámara de ese sector.
“Antes de las PASO la actividad había transcurrido con expectativas, pero luego de conocidos los resultados la compraventa de campos decreció en agosto‘”, dijo el titular de la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales, Javier Christensen, a Télam.
En Julio “había una caída normal, aunque se esperaba un leve repunte, pero eso no sucedió. Todavía no tenemos el índice de agosto, pero todo indica que será similar o superior la caída de las operaciones respecto de julio”, agregó.
Christensen sostuvo que “existe un miedo a un cambio de rumbo económico, con un posible aumento en el futuro en retenciones y restricciones cambiarias en el mercado de divisas. El Gobierno anterior es el que impuso el cepo, la ley de tierras rurales, con lo cual el sector agropecuario no tiene el mejor de los recuerdos”, apuntó al ser preguntado sobre la propuesta del diputado justicialista y ex gobernador bonaerense Felipe Solá, de recrear una Junta Nacional de Granos, cerrada a principios de los años 90, durante el gobierno de Carlos Menem.
“Todo lo que sea controlar, quita la libertad de producir”, remarcó. Señaló que “se calcula que habrá 140 millones de toneladas de granos cosechadas gracias a que los productores trabajaron con libertad, y de pronto que haya un cambio de rumbo, es lo que provoca incertidumbre en el mercado inmobiliario rural”.
Fuente Campo Litoral