- Vaciá y colocá boca a bajo baldes, botellas o recipientes que acumulen agua.
- Cambiá periódicamente el agua de floreros y bebederos de mascotas.
- Mantené limpio y desmalezados los jardines, patios y lotes baldíos.
- Evitá el agua estancada en alcantarillas, canales y desagües.
- Tirá objetos que no uses para evitar que el agua quede estancada en ellos.
- Usá repelente.