Con la Revolución de Mayo, existía la necesidad de tener una canción patriótica. El Triunvirato comprendió que debía brindarle al pueblo nacional una canción que lo identificara.
En un comunicado efectuado el 22 de Julio de 1812, al Cabildo, el gobierno imploraba la creación de la «Marcha de la patria», para ser efectuada al principio de las funciones teatrales y en las escuelas al finalizar diariamente las clases.
La Asamblea Soberana encargó al abogado Vicente López y Planes la composición de la letra y al músico y empresario teatral, Blas Parera.
Al año siguiente, la Asamblea mandó a componer la letra de la Marcha Patriótica, la cual fue aprobada el 11 de Mayo de 1813.