El cese en la comercialización de granos anunciado para la semana próxima será precedido por varias manifestaciones en distintos puntos del país. En Santa Fe habrá dos asambleas en el sur y una «Carpa Republicana» durante el fin de semana en el acceso a la ciudad de Avellaneda.
El malestar en el sector agropecuario por la decisión del gobierno de intervenir el mercado de maíz es general, pero el descontento se manifestará de distintas maneras durante los próximos días. Aunque lo más resonante es el cese de comercialización de granos la semana próxima, también se están gestando otro tipo de manifestaciones que incluso aspiran a instalar en la opinión pública cuestiones más de fondo que exceden al sector.
El paro
Sin la adhesión de Coninagro, que no considera apropiado el contexto social para iniciar una protesta, las restantes tres instituciones que componen la Mesa de Enlace (SRA, FAA y CRA) anunciaron que por 72 horas, entre la 00 hs del lunes 11 y las 24 hs de miércoles 13, no realizarán ventas de granos. «Las cuatro entidades que integran esta Comisión rechazamos el cierre del registro de exportación de maíz por tratarse de una medida absolutamente perjudicial para el campo y para la Argentina», manifestaron en un comunicado. Y solicitaron «revisar esta medida absolutamente negativa para los intereses de todos los argentinos, en un marco del diálogo con las autoridades que puedan resolver los destinos del futuro del campo y del país».
El ruralismo, según declaró el vicepresidente de CRA, Gabriel De Raedemaeker, aspira con la medida a forzar una negociación con el gobierno. «Apelamos -dijo- a que continúen las instancias de diálogo; la llave la tiene el gobierno para evitar este nuevo conflicto con el sector; pero la manera de revertir la situación es, cuanto menos, dar marcha atrás con esta resolución de prohibir la exportación de maíz». A ello sumó «una cantidad de situaciones preocupantes, muy poco propicias para la producción» como la presión impositiva o la inseguridad jurídica sobre la propiedad privada.
El diálogo
Por su parte el titular de Coninagro, Carlos Iannizzotto, expresó que si bien las bases cooperativistas rechazan la intervención de mercados y solicitan el levantamiento de la prohibición de exportar maíz, del mismo modo manifestaron la necesidad de «agotar todas las instancias de diálogo».
Al respecto el dirigente reprochó al presidente Alberto Fernández haberse comprometido públicamente a consolidar el diálogo y pese a ello ni siquiera atendió las propuestas del sector para impulsar la actividad y la generación de divisas. «Pero no creemos que un problema grave se solucione con otro conflicto», dijo en referencia al paro. En cambio solicitó abiertamente que el mandatario los atienda. «El contexto social, complejo y duro, no da para un paro ni para medidas que desalienten la producción», insistió. Y también se ocupó de aclarar que esto no implica romper con la Mesa de Enlace.
El territorio
Mientras tanto, en distintas partes del país se realizarán asambleas y manifestaciones de descontento. El movimiento Campo+Ciudad anunció actos en varias provincias. En suelo santafesino habrá una el viernes a las 18 hs. en el cruce de las rutas A012 y 34; y otra al día siguiente en Armstrong desde las 17.30hs, en la intersección de las rutas 9 y 178.
También se anuncian otras en Buenos Aires (Pergamino), Córdoba (Río Cuarto, Bell Ville, Jesús María y Pampa de Pocho) y en Entre Ríos (Crespo). En todos los casos con «obligatorio barbijo y distanciamiento» a raíz de la pandemia.
En el norte santafesino también habrá actividad en Avellaneda, donde el sector recibió un contundente respaldo de la ciudadanía ante el intento de intervenir Vicentín por parte del gobierno. En el ingreso a la localidad, ruta 11 y calle 21, se instalará una «Carpa Republicana», indicó el dirigente Juachi Capózzolo.
El reclamo, dijo, «que ya lo tiene absorbido la comunidad, va más allá del maíz o del campo sino que es más generalizado». Incluso explicó que un paro total hubiese ido «en contra de nuestra gente porque están levantando el girasol o liquidando hacienda por la sequía extrema que no se solucionó». Pero como finalmente se decidió «un paro light», consideró que «no pasa nada».
Por esta razón contó a medios locales que decidieron volver a manifestarse en el monumento a la fundación de Avellaneda, en el ingreso a la ciudad «con el objetivo de revalorizar los valores de la República». Y aclaró que será de viernes a domingo, por lo que «no va coincidir con el paro».
Para explicar las razones que impulsaron la idea sostuvo que si bien la población apoyó las protestas del sector, «veíamos agotado» el método utilizado en varias oportunidades y que consistió en actos y movilizaciones. Ahora,dijo, la idea es que «todo el mundo se acerque, podamos hablar unos con otros y compartir».
Capózzolo dijo que esperan el acompañamiento de los vecinos de Avellaneda y Reconquista. «La idea es que la presencia sea contínua, las 24 horas del día» y aspiran a contar con la presencia de medios locales y capitalinos.
Fuente Campo Litoral